Jon Iñaki Pérez Aranburu, detenido el viernes en Irun, ingresó ayer en la prisión madrileña de Soto del Real por orden del juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu. Europa Press, citando fuentes judiciales, informó de que Aranburu se negó ante el magistrado a ser entregado al Estado francés, que le reclama para que cumpla allí tres años de condena por un «delito de asociación de malhechores».

Las mismas fuentes confirmaron que Pérez Aranburu carece de causas pendientes en el Estado español por lo que, tras la negativa a ser entregado en virtud de una euroorden, el expediente seguirá su curso en la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional. Mientras tanto, el vecino de Donostia podrá presentar una alegación contra esta euroorden.

El Estado francés reclama a Pérez Aranburu después de que este fuera condenado «en rebeldía» en el año 2000. Fue el Tribunal Correccional de París quien le condenó a tres años de cárcel por un «delito de asociación de malhechores con el fin de la preparación de un acto de terrorismo», y prohibición de permanecer en territorio francés durante otros diez años, según informaron ayer fuentes del Ministerio del Interior español. De hecho, su arresto se produjo en virtud de la euroorden cursada por las autoridades francesas en 2005.

El Ministerio de Interior español le relaciona con un ataque con cócteles molotov realizado en 1995 en Errenteria contra un vehículo de la Ertzaintza, si bien en la Audiencia Nacional española no consta causa alguna contra él.