Con el paso de las jornadas, la clasificación en el Grupo II de Segunda B empieza a ofrecer una imagen más parecida a lo que cabía augurar, pero lo cierto es que las primeras semanas de la temporada han tenido como protagonistas a los equipos recién ascendidos que, en un número nada desdeñable, se han codeado con los gallitos de la categoría. La Peña Sport, que tras enlazar tres victorias llegó a asomarse a zona de play-off, es uno de los claros ejemplos de ello.

Pero al equipo navarro, como está sucediendo con la mayoría de los debutantes, le está costando mantener un ritmo regular. Un solo punto sumado en las cuatro últimas jornadas le ha hecho perder posiciones hasta situarle en la zona tibia de la tabla. Un bache que, sin embargo, no refleja el juego de los tafalleses. Esas buenas sensaciones, junto al colchón de puntos acumulado que permite a la Peña mantener el peligro a cierta distancia, avala la confianza del equipo de Sergio Amatriain.

«El equipo está a gusto en el campo -confirma Eneko Romo- y realmente estos últimos partidos no se nos han ido por mucho, hemos podido empatar o incluso ganar. Lo hicimos muy bien y creo que ahora tampoco estamos haciéndolo mal, pero nos está faltando una pizca de suerte, o quizá dar ese poquito más, para que no se nos vayan los puntos. Pero yo estoy convencido de que, si seguimos así, los resultados volverán a llegar». El atacante no es el único que lo piensa. De hecho, la clave de la reacción puede pasar por un vestuario que se muestra «convencido, con confianza y con ganas, porque vemos que estamos muy cerca, que los resultados están muy apretados. Ver que los resultados se nos están escapando nos duele, pero por suerte creo que lo estamos canalizando bien: no nos desmoraliza, sino que nos da ese punto de rabia, de ganas, y de dar ese punto más para pelear por la próxima victoria».

Si ese es el mensaje en la caseta, en el campo pasa por potenciar las virtudes y corregir los defectos. Es decir, por mantener «la fortaleza defensiva» -el equipo apenas ha encajado siete goles y solo el Lleida, en la primera jornada, ha sido capaz de hacerle más de uno- y recuperar chispa en ataque, tras haber saldado los cuatro últimos partidos sin poder celebrar un solo gol. «Estamos haciendo ocasiones -destaca el jugador iruindarra-, pero nos está costando muchísimo marcar y, sin goles, no es que sea difícil, es que es imposible ganar». Una situación que le duele especialmente por ser, precisamante, uno de los referentes ofensivos del equipo.

«Sí, ver que tenemos ocasiones y que no marcamos, y que teniéndolo tan cerca se nos van los puntos por poco, nos fastidia mucho», admite Romo que, también en este caso, destaca la importancia de la confianza. «Se suele decir que los delanteros vivimos de las rachas y es verdad que, el que marca, afronta el siguiente partido de otra manera. No sé si con mejores sensaciones, con un punto de tranquilidad, con más ánimo... Es importante que empecemos cuanto antes», asegura, y lo mismo sucede con las victorias. «Si te metes muy abajo, todos los equipos vienen a sacar puntos, no te respetan igual... Confío en que reaccionaremos pronto».

Diferente pero igual

El «pronto» más inmediato enfrentará a la Peña Sport con el Real Unión, el equipo en el que ha militado Romo las cinco últimas temporadas y al que desea «lo mejor. Pero esta semana que pierda», sonríe el futbolista navarro, que guarda muy buenos recuerdos de Irun, donde «viví cinco años muy buenos, con experiencias muy positivas», pero que tampoco tiene la más mínima queja en Tafalla.

«Estoy encantado, a nivel deportivo y con el trato que me están dando», subraya Romo, un jugador con mucho cartel en la categoría, pero que se decantó por la oferta de un club que demostró «muchas ganas de contar conmigo» y que le permite, además, «estar en casa. También hay que pensar en la familia a la hora de hacer maletas».

Y en el que no encuentra tantas diferencias con el Real Unión. «Las aspiraciones son distintas, pero una vez dentro del vestuario somos iguales. Un grupo de jugadores de entre 18 y treintaypico años, todos con las mismas ganas, a los que nos gusta jugar, competir y ganar».

La semana

Artilleros. Los dos goles que anotó en Tutera permiten a Altuna (Amorebieta) empatar con Guzmán (Alavés) al frente de la tabla de realizadores, ambos con cuatro dianas. Les sigue un pelotón de diez futbolistas con tres goles, entre los que se encuentran Ardanaz (Izarra), Arruabarrena (Eibar), Goikoetxea (Amorebieta), Larreategi (Amorebieta) y Eizagirre (Lleida).

Copa. El Eibar ha hecho públicos los precios para el choque de Copa que le enfrentará al Athletic el jueves 1 de noviembre (12-00). Los socios pagarán entre 10 y 20 euros y el resto de aficionados entre 20 y 50. Los socios pueden retirar sus entradas desde hoy hasta el próximo lunes; el sábado se abrirán las taquillas para el público en general.

Lesiones. A la confirmación de la rotura fibrilar de Oskar Martín (Sestao River), se unieron el domingo las lesiones de su compañero Jon Iru, aún sin diagnóstico confirmado, y sobre todo Iñigo Ruiz de Galarreta (Athletic), que sufre una rotura de ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda. La buena noticia llegó con otro verdinegro, Igor Cuesta, que reapareció en un amistoso frente al Balmaseda.

Visita. La AFE ha visitado estos últimos días los vestuarios de Real Unión, Amorebieta y Alavés. Se trata de visitas rutinarias, en las que se solventan las dudas de los futbolistas y se les informa de la labor de la AFE.