El Tribunal Supremo español rebajó en nueve años (de once a dos) la pena impuesta por la Audiencia Nacional a Zigor Ruiz al estimar que no se le debió juzgar por pertenencia a ETA, porque ya cumplió condena por ser integrante de Segi.

Luciano Varela, ponente de la resolución, considera que, en todo caso, la integración se manifestaría mediante la incorporación a Segi, y que no hubo ruptura entre dicho instante y el momento en el que «intensificando su compromiso decidió formar parte de un grupo reducido dispuesto a la inmediata asunción de actuaciones terroristas», ya que en la jurisprudencia hispana Segi forma parte de ETA.

Por ello, el Supremo considera que la condena de once años, ahora reducida a dos, supone «una doble sanción por el mismo hecho, lo que es contrario al principio de `non bis in idem´ [no juzgar los mismos hechos dos veces]» según la resolución».

Así, anula la condena de nueve años por integración en banda armada, quedando la pena de Zigor Ruiz en únicamente dos años de prisión por falsedad de documentos.

El alto tribunal, sin embargo, no ha estimado el recurso de Iñigo Albisu, que fue detenido junto a Ruiz el 27 de abril de 2007 en Sheffield por la Policía británica junto a Ana López, que fue exculpada tanto por Ruiz como por Albisu de ser militante de ETA.

No reprueban a Gastearena

Por otra parte, la Junta de Portavoces del Parlamento navarro rechazó ayer reprobar al alcalde de Atarrabia, Kirio Gastearena, de Bildu, por participar en un homenaje a los presos políticos vascos durante las fiestas de la localidad.

El texto, que fue propuesto por el PP, contó con el apoyo de UPN, pero fue rechazado por PSN, NaBai, Bildu e I-E.

El PP pedía que el parlamento reprobara a Gastearena por «despreciar a las víctimas del terrorismo y participar en un homenaje a miembros de la banda terrorista ETA», además de pedir que «se apoyen las investigaciones iniciadas por parte de la Policía Nacional y su análisis judicial para determinar si se ha producido algún tipo de delito».

La parlamentaria del PP Ana Beltrán arremetió contra el alcalde de Atarrabia, afirmando que «su actitud es inaceptable, por la ofensa que significa para las víctimas», aunque las críticas más duras se las llevó el PSN, «que votó en contra cuando uno de los homenajeados era el asesino de Isaías Carrasco». Los miembros del PSN se defendieron asegurando que «el Parlamento no es un órgano fiscalizar de los ayuntamientos».