14 millones de jóvenes que están en paro en la UE, ni buscan empleo ni se forman
J.B. | BILBO
Catorce millones de jóvenes de la Unión Europea entre 15 y 29 años «están en paro y no buscan empleo, ni se forman». Su imposible integración en el mercado laboral o en los servicios de formación académica y laboral conlleva, a juicio de Eurofound, agencia europea especializada en las condiciones de vida y de trabajo, «la pérdida económica para la sociedad europea de 153.000 millones de euros al año», lo que supone el 1,47% del PIB.
La realidad del Estado español indica que un total de 1,64 millones de jóvenes de entre 15 y 29 años, el 21,1% de la población, está afectado y generan un coste de más de 15.735 millones anuales en 2011, frente a los 10.794 millones en 2008.
En un amplio análisis como contribución a la Conferencia de la Presidencia de la UE sobre «Políticas de empleo y desarrollo sostenible de la juventud en una época de restricciones fiscales», confirma que solo un tercio de los jóvenes está ocupado en la UE. Por eso, Eurofound llama a los países a que «adopten medidas destinadas a la reinserción de jóvenes en el mercado de trabajo» y entiende que «necesitan empleo de buena calidad, estable y sostenible. Esto incluye equiparlos con las calificaciones necesarias para la integración laboral de éxito».
En realidad, 14 millones de jóvenes «no fueron contratados, ni buscaron empleo ni se formaron» en 2011, lo que supone un incremento de entre el 13% y el 15% en apenas cuatro años. En Bulgaria, Grecia, Irlanda, Italia, Rumanía y el Estado español este grupo «sin expectativas reales» asciende al 17%, en edades comprendidas de 15 a 24 años.
Esta agencia, conocida como la Fundación Dublín, confirma que esa situación de la juventud reporta unos costes de 153.000 millones a las arcas públicas de la UE. Para el cálculo, el estudio añade los costes en prestaciones por desempleo, por discapacidad, por sanidad y otros servicios sociales. Se tiene en cuenta el dinero que dejan de percibir las arcas públicas en impuestos, por la ausencia de ahorro y por consumo por parte de este grupo, «así como su incapacidad para aportar al sistema de pensiones y a planes privados». Desde el inicio de la recesión, a finales de 2007, el paro juvenil pasó de 1,5 millones, hasta los 5,5 millones (21%) en 2011. Según explican las conclusiones del estudio, el 73% de estos jóvenes que ni se forman ni encuentran un empleo -conocidos como los `ninis'- de entre 15 a 19 años no ha trabajado nunca, una cifra que se rebaja al 43% de 20 a 24 años, y al 28% en el caso de 25 a 29 años.
Eurofound augura «una generación que puede quedar fuera del mercado de trabajo durante años» y ve con «preocupación» estas cifras, cuando tendrán que «asumir las responsabilidades que representa el envejecimiento de la población».
Porque, destaca que «los menos formados son tres veces más propensos a estar en esa situación de paro y exclusión» en comparación con quienes cuentan con educación terciaria. Ser emigrante es factor determinante para tener estas consecuencias, dado que tienen un 70% más de probabilidades de engrosar el grupo.