El PSOE muestra prisa por recuperarse pero cierra filas en torno a Rubalcaba
Tras la debacle electoral, la dirección del PSOE decidió acelerar sus debates políticos pero rechazó la dimisión de Alfredo Pérez Rubalcaba o el cambio de dirección que reclaman algunas voces.
GARA | MADRID
Tras la debacle electoral en Galicia y la CAV, la dirección del PSOE apareció ayer dispuesta a hacer «todos los cambios» que sean necesarios para superar su «ciclo electoral negativo», y cree que el mensaje que le han enviado los ciudadanos es que debe ir «más deprisa y más a fondo» para recuperar su confianza.
Esa es la conclusión a la que llegó la comisión permanente de la Ejecutiva federal del PSOE, según explicó la vicesecretaria general del partido, Elena Valenciano, quien aseguró que en el encuentro no se planteó en ningún momento la dimisión de su líder, Alfredo Pérez Rubalcaba.
«Tenemos una tarea y un mandato y vamos a cumplir con las dos cosas», subrayó Valenciano antes de argumentar que la actual dirección lleva apenas ocho meses y su línea política fue avalada por el Comité Federal en setiembre.
Pero en el seno del partido se comenzaron a oir voces reclamando la dimisión de Rubalcaba a las pocas horas de conocerse los resultados electorales, como la de la exministra María Antonia Trujillo.
Valenciano argumentó que el PSOE ha perdido muchas más veces de las que han ganado en Galicia y CAV, y si cada vez que ha ocurrido hubiera tenido que dimitir el líder, el PSOE casi nunca hubiera tenido una dirección estable. Por eso, indicó que el PSOE está dispuesto a hacer los cambios ideológicos y programáticos que sean necesarios, pero sin incluir cambios orgánicos, por lo que se mantendrá la actual dirección.
La apuesta por acelerar la mejora del el funcionamiento interno y la apertura a la sociedad no incluyó la celebración de las elecciones primarias para elegir a su candidato a la Moncloa porque «el problema del país es otro» y el candidato «no es en absoluto el debate más urgente».
Acelerar las conferencias
Valenciano explicó que ir «más deprisa y más a fondo» se traduce, entre otras cuestiones, en acelerar el calendario de conferencias programáticas que tenía previstas hasta el año 2014, porque ha llegado el momento de poner sobre la mesa nuevas ideas. Rubalcaba hablará con los exministros Ramón Jáuregui y Valeriano Gómez, encargados de las conferencias de 2013 y 2014, para acortar los plazos de tres a un año.
Para la dirección del PSOE, «el ciclo electoral negativo» que comenzó con la salida del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero no solo no ha terminado, sino que todavía tardará en acabar. De hecho, se augura otra derrota en las elecciones catalanas del 25 de noviembre, ante las que Valenciano no precisó qué lecciones ha extraído el PSOE y optó por esperar a una próxima reunión con el PSC.
El eurodiputado Juan Fernando López Aguilar dijo que el PSOE atraviesa una situación «muy grave, la peor en 35 años» y consideró que ha llegado el momento de «refrescar» su imagen y el mensaje, pero sin hacer «giros dramáticos» ni con «titulares impactantes» ni con un «socialismo de twitter», en alusión a las críticas que de varios dirigentes del partido, que cuestionaron el liderazgo de Rubalcaba.
Además de la mencionada Trujillo, lo hicieron Odón Elorza, que pidió «hacer catarsis de una vez» o el alcalde de Jun (Granada), que planteó directamente una encuesta en la red sobre quién se considera que debe liderar el PSOE y propuso los nombres de Rubalcaba, Carme Chacón, Patxi López -que encabezaba elsondeo- y Eduardo Madina. Chacón también utilizó la red social para afirmar que hay que afrontar «tiempos difíciles».
Varios diputados del PSOE confesaron a los periodistas que la falta de mensaje unitario ante las demandas soberanistas, además de la crisis, ha pasado factura al partido de Rubalcaba.