Seis jornadas, seis derrotas, ningún gol a favor y treinta en contra. Los números son desoladores y, sin embargo, hay esperanza. Lo tiene claro Susana Bedmar, una de las veteranas de Lagunak, que recuerda otros momentos delicados y, sobre todo, la recta final de la temporada pasada, para constatar que el famoso «yes, we can» de Barack Obama se puede aplicar al conjunto amarillo.

Evidentemente, «no es fácil de llevar, pero todos los años tenemos el mismo objetivo y todos los años somos conscientes de que nos va a tocar sufrir para conseguirlo», recuerda. Más aún esta temporada, con muchísimas caras nuevas y una media de edad más baja incluso de lo habitual. Aunque no es el único factor que está haciendo mella en la trayectoria de las navarras.

«Se juntan muchas cosas. Está claro que el hecho de que el equipo sea nuevo y muy joven influye un montón, hace falta tiempo para hacer el equipo. Pero, como todos los años, tampoco hay que olvidar que estamos compitiendo con equipos que son superiores a nosotras económicamente, que hay muchísima calidad en muchos equipos. Y el hecho de perder una semana, y otra y otra..., te mete en una espiral de la que no es fácil salir. Cuando estás en buena racha tienes más confianza y todo parece más sencillo, los balones entran más fácil... Y cuando llega la mala sucede lo contrario».

Además, al revés de la campaña pasada, cuando el calendario también emparejó a Lagunak con algunos de los rivales más potentes en las primeras jornadas, el equipo de Barañain no ha sido capaz de sobreponerse cuando ha empezado «su» Liga. El punto de inflexión que debió haber supuesto la visita del Llanos Olivenza no se produjo y Susana admite que «fue un palo muy duro. Posiblemente fue el que más nos afectó anímicamente porque estábamos esperando ese partido para empezar a sumar».

Margen

La centrocampista, sin embargo, prefiere aferrarse a otro referente del pasado año, cuando «aprendimos que lo más difícil también es posible». «Estos días lo estamos recordando, que lo pasamos supermal -explica-. Porque la primera vuelta la hicimos muy bien, pero la segunda se nos complicó muchísimo y al final teníamos que ganarlo prácticamente todo. Veíamos que nos quedaban tres o cuatro partidos y parecía imposible, pero lo conseguimos». Ese margen escasísimo al que supieron hacer frente le invita a afrontar con optimismo el futuro. «Es una temporada diferente y un equipo diferente, pero ahora tenemos toda la temporada por delante. El año pasado fue un momento mucho más delicado porque teníamos que ganarlo todo sí o sí, todo eran finales. Ahora también nos tenemos que tomar así los partidos, pero sabiendo que hay margen, también para que el equipo siga creciendo, y que estamos a muy poquita distancia. Con una victoria nos metemos y eso también nos tiene que animar».

Una victoria que, ¿por qué no?, podría llegar el domingo en Valencia -coincidiendo con la reaparición de Susana, que se ha perdido los dos últimos encuentros por una lesión en un dedo del pie-. Y que se agradecería especialmente, teniendo en cuenta que luego llegan las citas ante Barcelona, Real y Sporting. «Yo creo que se puede. Al menos un empate, que nos vendría muy bien, pero por qué no algo más. Yo creo que podemos -insiste la centrocampista- y realmente nos vendría muy bien, en la clasificación y, sobre todo, para coger moral».

La semana

Real. La Real, que retoma la competición recibiendo al Barcelona, se impuso al Zarautz (6-1) en el amistoso disputado el pasado viernes en Zubieta. El club, además, exhibe ya en el Museo Real 100 la Copa Euskal Herria que se adjudicó el pasado mes de agosto. El trofeo está colocado junto a la camiseta de la excapitana txuriurdin Larraitz Lucas.

Cuadrangular. El Athletic se impuso en el IV Trofeo Aurrera, disputado en Olaranbe. Las rojiblancas empataron con Osasuna (0-0), al que derrotaron en la tanda de penaltis, y superaron en la final al Oviedo Moderno (2-0). El anfitrión cayó ante las asturianas en el primer choque (0-2) y empató después con Osasuna (0-0), que se hizo con el tercer puesto en los penaltis.

Fichaje. Según informa EFE, el Atlético de Madrid ultima el regreso de Adriana Martín, tras su paso por el New York Flash y el Chelsea. La atacante turolense ya había militado la temporada pasada en el conjunto colchonero, que abandonó en abril para jugar en Nueva York y, posteriormente, Londres.

Australia. Empate al frente de la clasificación en el arranque de la Liga australiana. Perth Glory y Adelaida United ganaron en su debut, aunque el golaverage da el liderato a las primeras. El inicio liguero, con todo, quedó eclipsado por el anuncio de la retirada de Sara Walsh que, a sus 29 años, se ha sometido a 15 artroscopias y sufre artritis severa en las dos rodillas.