Afortunadamente para el Athletic apenas tiene tiempo para rumiar una amarga derrota como la que se produjo el jueves frente al Olympique de Lyon. Los de Bielsa ya están pensando en borrar de la mente dicho resultado y centrarse en un Sevilla al que han derrotado en sus dos últimas visitas a San Mamés. Encadenar el tercer triunfo casero consecutivo ante los hispalenses sería el mejor método para reconciliarse con una afición un tanto resentida.

Lo cierto es que tras una época en la que los andaluces se manejaban como nadie cada vez que arribaban a La Catedral, en tiempos más recientes los de Nervión han mordido el polvo de la derrota. Fue así la campaña pasada cuando hincaron la rodilla merced a un gol al comienzo de la segunda parte de Fernando Llorente.

También se marcharon de vacío de Bilbo en la 2010-11, en esa ocasión con un marcador todavía más adverso, un 2-0 que se fraguó gracias a los goles de Fazio, en propia puerta, y de Iraola, de penalti. Esta última victoria local cortó una racha de cinco triunfos visitantes en seis partidos.

De hecho, los enfrentamientos entre vizcainos y sevillanos se han caracterizado de manera reciente por ser envites en los que el empate brilla por su ausencia. De las últimas once ocasiones en que ambas escuadras se han medido en competición liguera en San Mamés, el Athletic se ha impuesto en seis oportunidades por las cinco mencionadas de los nervionenses.

«Medio campo muy fuerte»

Carlos Gurpegi analizó precisamente el esqueleto del rival al que se medirán mañana. «Tiene un medio campo muy fuerte, con Medel y Maduro, un delantero de gran nivel, como es Negredo, y un hombre con la velocidad de Jesús Navas, que es importantísimo para este equipo», aseguró el de Andosilla.