La Orquesta Filarmónica de Bruselas ha ofrecido el primer concierto en el que los músicos leyeron sus partituras en la pantalla de una tablet en vez de hacerlo sobre el papel, mientras interpretaban una selección de piezas de la ópera «Tristán e Isolda», de Richard Wagner, y el «Bolero», de Maurice Ravel. Esta orquesta asegura ser la primera en cambiar las tradicionales partituras de las obras clásicas por un centenar de tabletas que permite a sus músicos ahorrar espacio y ganar en comodidad.