Sudán asegura que ha abortado «un complot» de militares y civiles
GARA | JARTUM
Los servicios secretos de Sudán abortaron un complot supuestamente llevado a cabo por militares y civiles opositores que pretendía «desestabilizar e instigar el caos» en el país, anunciaron las autoridades en un comunicado. El ministro de Información sudanés, Ahmed Belal, anunció la detención de trece personas, entre ellas el exjefe de los servicios secretos sudaneses Salah Abdalah, un miembro de esos servicios, el general Mohamed Ibrahim; y otro del Ejército sudanés, Adel al-Tayeb.
Según Belal, los arrestados habían organizado una trama para desestabilizar el país y quisieron matar el pasado jueves a responsables en el poder, pero pospusieron sus planes con la intención de ponerlos en marcha ayer.
Aseguró que el complot no supone «ningún peligro para el Estado» y que la situación de seguridad en el país era «muy estable». Tildó de «fantasía» cualquier intento de derrocar al Gobierno.
Testigos consultados por Reuters señalaron que vehículos militares patrullaban la principal calle de la capital desde la medianoche del miércoles. «Hemos visto algo inusual en Jartum: cuatro vehículos blindados y dos tanques en la calle Abeid Jatim rumbo al centro de la ciudad», remarcó un viandante. No obstante, otro testigo aseguró que las sedes del Ministerio de Defensa y de los servicios de Inteligencia, así como otros edificios gubernamentales relacionados con la seguridad permanecían en calma en las primeras horas de ayer.
En los últimos días distintos políticos sudaneses han denunciado un intento de golpe de Estado contra el presidente del país, Omar al-Bashir, pero el gobernante Partido del Congreso Nacional ha negado tales informaciones.
Sudán ha sido escenario de protestas por la subida de los precios y a favor de la restauración del sistema democrático en un país que ha estado gobernado por Al-Bashir desde que en 1989 alcanzara el poder mediante un golpe de Estado.