SEGUNDA B | 25ª jornada
El líder se refuerza a costa de un aspirante a la baja
El Alavés eleva hasta los diez puntos la ventaja sobre un Eibar que atraviesa su peor momento.
ALAVÉS 1
EIBAR 0
GARA | GASTEIZ
El partido del año en Mendizorrotza -al menos hasta que llegue el play-off- se saldó con mucha intensidad y un gol que puede valer el título y la confirmación de que el Eibar atraviesa su peor momento de la temporada. Tanto, que ha dejado de ser el gran rival del Alavés. Diez puntos de renta sobre los azulgranas tiene ya el equipo de Natxo González, que ahora siente el resuello del Bilbao Athletic, pero al que la victoria ante el otro gran candidato del triunfo puede haber dado no solo los puntos, sino la convicción -casi igualmente importante- de que esta temporada es la suya.
Lo cierto es que, pese a que el Eibar bien pudo haberse llevado un resultado más positivo, no hicieron sino ratificarse las tendencias. Buena, como no ha dejado de serlo desde que arrancó el curso, la de los albiazules. Claramente descendente la del cuadro armero, que solo ha celebrado una victoria en las seis últimas jornadas y que, pese a su condición de máximo goleador de toda la categoría, acumula ya 270 minutos sin ver puerta.
Ayer se vio superado de inicio por un anfitrión que salió presionando arriba, impidiendo que los eibartarras se desenvolvieran bien en labores de creación. Fruto de esa intensidad en la primera línea llegaron las primeras aproximaciones peligrosas del cuadro gasteiztarra, que no acabaron en gol gracias al buen hacer de Xabi Iruretagoiena. El cuadro visitante se veía superado en estos primeros compases por un Alavés que puso cerco a su portería, sobre todo a balón parado. Pero, progresivamente, los hombres de Garitano fueron entonándose, sacudiéndose la presión de su rival y, en consecuencia, empezando a medorear con peligro las inmediaciones de Crespo. La opción más clara del primer tiempo, no obstante, corrió a cargo de los de casa. Cómo no, a balón parado. Y por medio de un exarmero, Sendoa, que puso a prueba los reflejos de Xabi en la ejecución de un libre directo que salvó el guardameta visitante con una estirada por bajo.
Mejoría sin premio
Sin excesivas ocasiones y con el marcador a cero, pero el partido llegó al descanso con la sensación de responder a las expectativas. Que tras el paso por vestuarios aumentaron para el Eibar, más entonado en el regreso al césped. En modo dominador, se apoderó de la pelota y, esta vez sí, supo crear fútbol en la parcela ancha. El problema es que las ideas escaseaban cuando el balón alcanzaba la línea de tres cuartos. No se incomodó el Alavés, sin reparos en ceder la iniciativa, pero pertrechándose en defensa y haciendo de las transiciones rápidas su baza para generar incertidumbre en la zaga visitante. Con fortaleza y también con algunos apuros, el equipo de Natxo González no solo sobrevivió al asedio del Eibar, sino que además le apuntilló cuando apenas quedaba margen de reacción por delante. A diez minutos del final y poco después de saltar al rectángulo de juego, Juanma se marchó de cuantos rivales le salieron al paso y puso el cuero en el área para que Gorka Laborda cediera y Borja Viguera definiera.
Apretó el Eibar los dientes, pero el ímpetu fue mayor que la cabeza, lo que permitió que el Alavés mantuviera su renta.