Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) entregaron ayer al soldado Josué Álvarez Meneses a una comisión humanitaria formada por el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y la ONG Colombianas y Colombianos por la Paz. Meneses fue capturado por la guerrilla el pasado 31 de enero durante los combates con el Ejército.

Esta entrega completó el operativo de liberación de tres retenidos por parte de las FARC, que el viernes devolvió la libertad a los policías Cristian Camilo Yate y Víctor Alfonso González, retenidos desde el 25 de enero.

Ese día Colombia vivió una jornada sin precedentes ya que a la entrega de los dos policías por parte de las FARC, se sumó la liberación de cinco trabajadores de la compañía minera Geo Explorer retenidos por el Ejército de Liberación Nacional (ELN) desde el pasado día 18 de enero.

Los liberados por el ELN fueron los peruanos Javier Leandro Ochoa y José Antonio Mamani, y los colombianos William Batista, Manuel Zabaleta y Alexis López. El vicepresidente de la empresa, el canadiense Jernoc Wobert, retenido junto a ellos, permanece aún con la guerrilla.

El canal venezolano Telesur transmitió en directo la entrega, del soldado Álvarez Meneses efectuada en un caserío de la zona rural del municipio de Policarpa, en el departamento de Nariño, ubicado en el suroeste de Colombia y en la frontera con Ecuador.

Dos guerrilleros escoltaron al soldado, de 19 años, vestido con camiseta a rayas y pantalón tejano, hasta el lugar donde se encontraban los miembros de la misión humanitaria.

En declaraciones a Telesur, el militar relató que fue retenido en un combate en el que fue alcanzado por una esquirla, y comentó que la guerrilla le trató «bien».

Tres soldados muertos

Por otro lado, tres militares resultaron muertos y tres más quedaron heridos durante un ataque contra un camión militar en una zona rural cercana a la capital colombiana, que el Ejército atribuyó al frente 53 de las FARC, presente en esta parte del país.

El ataque ocurrió en la zona conocida como Nazaret, en el Sumapaz, una región de páramo hasta la que se extiende la zona rural de la capital colombiana.

Los militares iban a bordo de un camión de la institución y se dirigían a un Batallón de Alta Montaña de la zona, cuando fueron atacados con disparos de fusil y explosivos.

La acción se produjo dos días después de que siete soldados murieran y cinco más resultaron heridos tras un enfrentamiento con las FARC en el departamento del Caquetá.