Bake Bidea y Lokarri, organizadores del Foro Social que se va a celebrar en Bilbo e Iruñea dentro de dos semanas y que cuenta además con el respaldo de diversas organizaciones y la participación de expertos internacionales, anunció ayer que la doble cita dará cabida a ideas nuevas, concretas y constructivas para la consolidación del proceso. Precisamente con ese ánimo, el de profundizar en el camino emprendido por este país hacia un escenario de paz y democracia, el Colectivo de Presas y Presos Políticos Vascos (EPPK) ha cursado una petición a los estados español y francés para que sus portavoces puedan asistir y hacer sus aportaciones.

Respondiendo afirmativamente a la invitación recibida por parte de los convocantes, el Colectivo de Presos insiste en su determinación de dar pasos y recuerda que los temas que se van a tratar en el foro tienen difícil solución sin su participación activa. Asimismo, cita la existencia de mecanismos legales para posibilitar la asistencia de sus interlocutores, dejando el camino expedito a los mandatarios españoles y franceses, tan habituados a buscar excusas en estos casos.

«Seguiremos ahondando en esta estrategia, dando nuevos y decisivos pasos. Así nos lo pide y exige la sociedad vasca», anunció el Colectivo en junio del año pasado, y así lo ha demostrado desde entonces. Ninguna solución real puede dejarlos al margen y eso lo saben también quienes tienen en su mano posibilitar su asistencia al Foro. Si albergan un mínimo interés en encontrar una salida razonable al conflicto, deberían responder positivamente al emplazamiento. Sin embargo, es notoria la falta de voluntad política de Madrid y de París, por lo que siendo realistas la noticia sería realmente que accedieran a la petición. Ese, en cualquier caso, terminará siendo su problema. La iniciativa de EPPK tiene el valor añadido de subrayar que los presos vascos no se quedan esperando cruzados de brazos ni son ajenos a los pasos que vaya dando la sociedad vasca.