«Desde el principio dijimos que este gobierno iba a decir la verdad, lo hemos hecho y lo vamos a hacer. Y hay que reconocer que este año va a ser el peor de toda la historia reciente de Euskadi». Así de contundente se mostró ayer el lehendakari Iñigo Urkullu durante su intervención en la inauguración del Centro de Estudios Políticos Aguirre Lehendakaria.

Urkullu aprovechó el acto para realizar un repaso de la situación económica, social y política del país y exponer sus alternativas. Este negro panorama tiene, a su juicio, una sola solución: «Recuperar el espíritu de superación de los vascos, ser capaz de reinventarse, ser responsables, realistas y dejarse de fuegos de artificio que no aportan nada».

Ese espíritu de superación se materializaría, en opinión del lehendakari, en «dar a conocer al mundo la marca Basque Country, internacionalizar Euskadi, apostar por la innovación social, salir al mundo y dar a conocer el espíritu de desarrollo que siempre nos ha caracterizado».

Urkullu realizó estas declaraciones en el marco de la presentación del Aguirre Lehendakaria Center for Social and Political Studies (ALC), fundación presidida por Juan Jose Ibarretxe destinada a «promocionar en el exterior nuestra lengua, nuestros valores y nuestra cultura».

Precisamente, Urkullu eligió la figura del primer lehendakari como referente para afrontar el futuro más cercano: «Toca, como hiciera Aguirre en su momento, apretar los dientes y mirar hacia adelante. Sin buscar la gloria, apuntalando la fachada del país y profundizando en sus cimientos».

Reaparece Ibarretxe

La presentación de este nuevo centro de estudios políticos sirvió como escaparate para la vuelta a la primera línea, aunque de manera efímera, del lehendakari Juan Jose Ibarretxe, apartado de la política desde 2009. Y lo hizo acompañado de las figuras más importantes de su partido. Jose Luis Bilbao, Iñaki Azkuna, Juan Mari Atutxa, Joseba Egibar, Markel Olano o la exparlamentaria de Aralar Aintzane Ezenarro fueron testigos de esta reaparición.

Ibarretxe expuso las líneas maestras de este nuevo proyecto que, como él mismo reconoció, ha sido gestado en su mayor parte durante su larga estancia en Estados Unidos.

A grandes rasgos, el nuevo centro de estudios tiene tres objetivos: formación, innovación e investigación. La correa de transmisión de todos los valores será el fomento de la cultura vasca, del euskara y, en términos generales, de la identidad nacional.

Para ello, la fundación ha elegido al primer lehendakari de la historia como símbolo. Ibarretxe glosó la figura de Jose Antonio Aguirre, haciendo un repaso de su trayectoria desde la Alcaldía de Getxo hasta su exilio y su trabajo en la Universidad de Columbia.

Según explicó, la nueva fundación, con ese mismo espíritu, «tratará de ser un puente entre Euskadi y el resto del mundo para situarnos en el panorama global».