El récord histórico del Dow Jones, de nuevo sobre los 14.200 puntos alcanzados en 2007, fue el catalizador perfecto para las bolsas. Y todavía más: el S&P 500 no estaba lejos ayer de sobrepasar también su máximo histórico de 2007 al cierre de las negociaciones a este lado del Atlántico. Todos los índices acabaron con alzas importantes, aunque fue el Ibex, que saltó un 2,15%, uno de los más favorecidos. Hoy saldrá desde los 8.423,30 puntos, un 3,13% por encima del comienzo del ejercicio. Por su parte, Fráncfort se anotaba un 2,32%, París, un 2,09%, y Londres, un 1,36%. La euforia desatada por el hito del Dow Jones, que superaba niveles previos a la crisis de las hipotecas basura, venía a sumarse a algunas referencias positivas de gran calado. De una parte, en Estados Unidos se conocían la intención firme de la Fed de mantener los estímulos económicos y un buen dato del ISM de servicios de febrero. Además, China se reafirmó en su previsión de crecer este año al 7,5%, mientras que desde Japón se informaba de la entrada en el banco central de directivos defensores de cambios en la política monetaria para favorecer la reactivación. El grave contrapunto para el Estado español, que no llegaba a cotizar, tenía la firma de Bruselas. La Comisión Europea pide más impuestos, subidas en el IVA reducido, menos derechos laborales y anticipar el retraso en la edad de jubilación. En el Ibex, con todos los valores al alza, los mejores fueron IAG (+4,11%), Indra (+3,74%), Inditex (+3,46%) y ArcelorMittal (+3,13%). En París, Gemalto (+4,10%) y Société Générale (+4,08%) lideraron las ganancias.