Chávez se va, su proyecto se queda
«Chávez sigue en nuestros corazones», declaran sus seguidores ante su ataúd
GARA | CARACAS
Con canciones, consignas y lágrimas, una marea de cientos de miles de venezolanos acompañaron ayer al féretro de su presidente, Hugo Chávez, fallecido el martes a causa de un cáncer, pero «todavía presente» en los corazones de sus seguidores.
«Hasta la victoria siempre, comandante, te queremos», gritaba con los ojos anegados en lágrimas Héctor Carrasquel, un cuarentón llegado del norte del país, para rendir honor a su presidente. «¡Viva mi comandante, nosotros amamos a Chávez!», insistía intentando en vano acercarse al cortejo fúnebre, escoltado por los boinas rojas de la Guardia Presidencial de Honor y presidido su madre, Elena Frías; el vicepresidente, Nicolás Maduro, y el presidente de Bolivia, Evo Morales.
El féretro recorrió trece kilómetros desde el Hospital Militar hasta la Academia Militar, donde quedó instalada -hasta mañana- su capilla ardiente, ante la que desfilarán cientos de miles de venezolanos. A las 10.00 de mañana (15.30 en Euskal Herria) tendrán lugar el funeral y su entierro.
La caravana presidencial, rodeada por una multitud llegada de todo el país, recorrió en lenta procesión las principales calles caraqueñas bajo un calor sofocante. Perdido entre la multitud, un grupo de madres beneficiadas por alguno de los muchos programas sociales implementados por Chávez lanzaba claveles rojos al paso del féretro. «La flor roja representa el color de la revolución, el color de nuestra sangre, de nuestro corazón, donde llevamos al presidente, que seguirá haciendo latir el corazón de los pobres», señalaba Alexandra Rivas.
Miles de seguidores del líder bolivariano se habían reunido frente al hospital para homenajear a su presidente antes de que el féretro fuera llevado a la Academia Militar. «Vine a dar mi último adiós al presidente. No habrá otro Chávez, es el hombre más grande que ha parido este país», decía José Gregorio Conde, un empleado público de 34 años.
Aldemar Castro, de 29 años, admitía tener dificultades para expresar sus sentimientos, pero los llevaba en su camiseta: «Chávez, vivirás siempre en mi corazón».
Las autoridades venezolanas esperan a decenas de jefes de Estado o de Gobierno, delegaciones gubernamentales y líderes políticos en el funeral de lugar mañana. Los presidentes Evo Morales (Bolivia), Cristina Fernández (Argentina) y José Mujica (Uruguay) fueron los primeros en llegar, por la mañana, a Venezuela, y durante el día se esperaba a Rafael Correa (Ecuador). También confirmaron su asistencia Dilma Rousseff (Brasil), Ollanta Humala (Perú), Sebastián Piñera (Chile), Danilo Medina (República Dominicana) y Ricardo Martinelli (Panamá), mientras que Raúl Castro (Cuba) no había asegurado su presencia y Mahmud Ahmadineyad (Irán) expresó su deseo de acudir. EEUU enviará una delegación a Caracas.
Hugo Chávez, por su «altura política» y «consagración a la patria», merece ser sepultado en el Panteón Nacional, donde se encuentra la tumba del Libertador Simón Bolívar y otros próceres, dijo el diputado Freddy Bernal. El Gobierno señaló que recibirá sepultura donde su familia quiera.
Sortu, Alternatiba, Aralar, LAB, Askapena y Komite Internazionalistak, además de expresar su apoyo a la revolución bolivariana, coincidieron en su llamamiento al pueblo venezolano a continuar la lucha iniciada junto a Hugo Chávez para afianzar el proceso de cambio político y social.
Sortu destacó su papel en la integración de América Latina y en la construcción del socialismo del siglo XXI, al tiempo que animaba a continuar el camino emprendido y recordaba que corresponde al pueblo venezolano «determinar el futuro y la orientación del proceso bolivariano de modo democrático y sin injerencias extranjeras». Además, alentó a seguir trabajando por un modelo de relaciones internacionales respetuoso con la dignidad de las personas y los derechos de los pueblos.
Alternatiba le definió como «luchador incansable» en favor de los derechos de los oprimidos y contra «el sistema criminal en el que vivimos» y Aralar consideró que supo «garantizar los derechos de la ciudadanía y profundizar en la igualdad».
LAB sostuvo que «su obra política y social a favor de los sectores más desfavorecidos de Venezuela perdurará».
Askapena se mostró convencida de que el pueblo venezolano «seguirá escribiendo su historia de dignidad, libertad e independencia».
También expresó su solidaridad con la revolución bolivariana y la lucha del pueblo venezolano Komite Internazionalistak.
La editorial Txalaparta, que ultima la publicación de la autobiografía de Chávez «Cuentos del arañero», resaltó su figura como líder para su país y «referente para la izquierda mundial».
