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BALONMANO Recopa (1/4 de final, ida)

Bera Bera 2.0 arrolla a Bera Bera

Bera Bera aguantó 40 minutos gracias a su derroche defensivo y a la actuación de Zoqbi, pero acabó pagando su inferioridad ofensiva.

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BERA BERA 15
THÜRINGER HC 33

Juan Carlos ELORZA

A un lado Bera Bera, y enfrente un rival con muchas similitudes pero más recursos, un Bera Bera mejorado, 2.0. Sobre todo en el tiro exterior, donde Nadgornaja demostró que no necesita ninguna elaboración previa para levantarse en suspensión y marcar, porque con su físico y ese poderoso brazo mediatiza cualquier labor defensiva. No queda otro remedio que prestarle atención, mucha atención, y sus compañeras acaban aprovechándose. Bera Bera no tiene una jugadora así, no puede pagarla, y a estas alturas de Recopa pueden pasar estas cosas.

Los 60 minutos incluyeron dos partidos completamente diferentes, uno que se jugó hasta el minuto 39.45 (11-13 en el marcador), y los 20.45 últimos (un brutal parcial de 4-20), en que el Thüringer hizo gala de un instinto muy parecido al que ha permitido llegar a Bera Bera a donde está: en cuanto las donostiarras mostraron síntomas de flaqueza y perdieron los papeles unos instantes, las alemanas las arrollaron con un demoledor 0-9 en seis minutos (11-22) que hundió a las donostiarras. Agotadas y superadas, Bera Bera siguió peleando y arriesgó para rebajar la diferencia, pero Thüringer no se relajó un ápice hasta lograr una ventaja insuperable, excesiva pero a la vez justa, tras tener unos inicios dubitativos pero mostrar su verdadero potencial en la segunda parte.

La primera mitad fue una exhibición de actividad defensiva entre dos rivales que demostraron que disfrutan en esta faceta del juego, fundamental para equipos con aspiraciones. Bera Bera se adelantaba 2-0 mientras el Thüringer perdía cuatro posesiones de balón en cinco minutos, antes de marcar su primer gol. Pero luego hicieron seis seguidos (2-6), apoyándose en su fuerte defensa y su portería.

Los contraataques escaseaban porque ambos equipos cuidaban mucho sus balances defensivos, y tanto Zoqbi como März brillaban en ambas porterías (7 paradas de la brasileña, y 6 de la alemana). Pero un par de detalles dificultaban aún más el potencial ofensivo donostiarra: los penaltis volvieron a convertirse en un problema. Rubio lanzó el primero al poste, recogió su rechace y volvieron a hacerle penalti, lanzado esta vez por Ziarsolo, que lo enviaba fuera (en la segunda parte, con 10-13, Eli Pinedo mandó un tercero fuera).

El otro problema fue el de las dos diferentes varas de medir aplicadas por la pareja arbitral, y su permisividad con la defensa alemana a las pivotes de Bera Bera, que privaron al equipo donostiarra de uno de sus mejores recursos en el juego posicional.

La derrota era la primera en casa para Bera Bera en lo que va de temporada, y además la mayor diferencia de goles que ha encajado en Europa en 77 partidos (la anterior fue un 30-17 en Larvik en 1997). En mi opinión no fue más que un accidente, afortunadamente sin víctimas en forma de lesiones, y tampoco debe significar mayor golpe para la moral donostiarra, salvo la lógica decepción pospartido.

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