
Un punto de inflexi�n para seguir trabajando
Estrasburgo va a ser escenario de una contienda jur�dica con un enorme trasfondo pol�tico y cuyo desenlace va a condicionar en gran medida el futuro pr�ximo de este pa�s. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos debe estudiar el recurso interpuesto por el Gobierno espa�ol contra la sentencia que le obliga a poner en libertad a In�s del R�o y a resarcirla por mantenerla en prisi�n a pesar de haber cumplido su condena inicial, en aplicaci�n de la doctrina 197/2006 del Tribunal Supremo. Precisamente, a trav�s del caso de la presa de Tafalla es esta norma la que va a ser enjuiciada, y con ella uno de los puntales de la estrategia espa�ola contra los presos vascos.
Por ese motivo, hoy todos los ojos est�n puestos en la capital alsaciana. Es mucho lo que est� en juego. En primer lugar, para In�s del R�o y para el resto de presas y presos que pueden verse afectados por la sentencia. Y por supuesto, tambi�n para sus familias. Pero a nadie se le escapa el impacto que el fallo puede tener en el escenario pol�tico de Euskal Herria, que lleva meses bloqueado. Si la Gran Sala ratifica la sentencia adoptada por la Sala Tercera, los afectados por la doctrina podr�an recobrar la libertad en un corto plazo y, adem�s, las expectativas de muchas otras personas encarceladas ser�an diferentes. Y cuando Madrid no muestra ninguna intenci�n de rebajar la presi�n en las c�rceles, esta posibilidad dar�a aire al proceso. Al contrario, si finalmente Estrasburgo diera la raz�n a las autoridades espa�olas, estas tendr�an m�s f�cil mantener su enroque.
Con todo, la posibilidad de que Euskal Herria alcance el objetivo de paz y democracia que se ha fijado no est� en manos de la corte europea. El fallo, que a�n tardar� en llegar, puede facilitar o entorpecer el camino, pero este debe ser recorrido por la sociedad vasca. La soluci�n sigue estando aqu�, en la capacidad que tiene este pueblo de generar las condiciones necesarias para alcanzarla. No en Estrasburgo, cuya resoluci�n ser� un punto de inflexi�n para seguir trabajando.