Anaitasuna y Academia Octavio se ven las caras este mediodía (12.30, Casado y Vera -Andalucía-) en condiciones muy diferentes al partido que se disputó en Vigo hace ya cinco meses. Entonces los gallegos sumaban 4 puntos en su casillero, por 3 de los navarros, y todavía era pronto para deducir el rumbo que tomaría cada equipo. El contundente 28-38 final, tras un primer tiempo perfecto en ataque para el equipo de Etxaburu (19 goles de 23 lanzamientos, un 83%), significaba el primer triunfo fuera de casa, elevaba a tres la racha de partidos sin perder, y proporcionaba una confianza que catapultó a los navarros hacia arriba, mientras los gallegos encallaban en la zona peligrosa.

Hoy Anaitasuna buscará los puntos que le permitan seguir luchando por la sexta plaza, mientras el Octavio llega a Iruñea con la presión que provoca estar ubicado en la zona de peligro a estas alturas. Solo un punto le separa de sus vecinos de Cangas, el que marca la línea del descenso. El Octavio está obligado a sumar donde pueda, y tratará de hacerlo ante Anaitasuna.

Etxaburu podrá contar con Jon Latorre para este partido, recuperado ya de su lesión en la mano izquierda, y el concurso del pivote ayudará a reforzar el juego defensivo del equipo. Los otros resultados de la jornada (derrotas de Ciudad Encantada, Huesca y Granollers) han favorecido la posición de Anaitasuna, que podría alcanzar al Huesca si consigue ganar hoy.

Pero Etxaburu, tras recalcar que la victoria de Palma del Río solo tendrá valor si logran vencer también al Octavio, advertía sobre la veteranía del equipo gallego -destacaba jugadores como Fran González o Dasilva, aunque su máximo goleador es el joven central Pablo Cacheda-, «al que no le queda otra que luchar desesperadamente por salir de esta situación».