Los partidos de vuelta de las semifinales de la Europa League se juegan hoy a partir de las 21.05. Por un lado, el Chelsea tiene ya pie y medio en la final del próximo 15 de mayo en el Amsterdam Arena, tras superar al Basilea por 1-2 en Saint Jakob Park. Benfica y Fenerbahce, por su parte, se enfrentan en Lisboa con una mínima renta, 1-0 en Estambul, para los turcos.

El Chelsea dejó todo encaminado hace una semana en Basilea. Un gol del nigeriano Víctor Moses, el tercero en los últimos tres encuentros, y otro del brasileño David Luiz, en el minuto 94, interrumpidos por un tanto local a través de un penalti muy dudoso, le dieron una victoria con pinta de clasificación.

No obstante, el campeón suizo, que ya eliminó a Tottenham o Zenit de San Petersburgo en las rondas previas, no renuncia a nada en su visita a Stamford Bridge, a pesar de que sus números a domicilio ofrecen muchas dudas: cuatro empates y dos derrotas en sus últimos seis desplazamientos en los torneos continentales.

El Chelsea, por contra, es extremadamente fiable en su terreno en la competición europea. De sus últimos doce choques internacionales en su estadio, el equipo blue ha sumado diez victorias, dos empates y ninguna derrota. Hoy no dispondrá del sancionado Ashley Cole, pero sí del núcleo que ha hecho posible llegar a las puertas de una nueva final.

El Fenerbahce, mientras tanto, viaja con ventaja a Lisboa, escenario de su mayor derrota de la historia en Europa, el 7-0 que recibió en la primera ronda de la Copa de Europa en 1975-76. El nivel es mucho más parejo hoy en día, como demuestra el único gol marcado en la ida por Egemen Korkmaz. De hecho, los otomanos pueden clasificarse para su primera final europea alcanzando un récord continental: siete desplazamientos consecutivos sin derrota.

Mucho más amplio es el currículum del Benfica, bicampeón de la Copa de Europa y cuartofinalista de la Champions el pasado año, sin ir más lejos. Los portugueses confían en su solvencia en casa -12 triunfos y un empate en 13 partidos- para dar la vuelta a la eliminatoria con la ayuda de sus aficionados.