Moscú detiene a un estadounidense acusado de intentar reclutar espías
Solo una semana después del encuentro de John Kerry con Vladimir Putin en Moscú, la tensión volvió a las relaciones entre EEUU y Rusia con la detención de un agente de la CIA que, según los servicios secretos rusos, intentaba reclutar a un espía ruso.
GARA | MOSCÚ
«El agente de la CIA Ryan C. Fogle, trabajando bajo la cobertura de tercer secretario del departamento político de la Embajada, fue detenido en la noche del lunes al martes», según anunció el Servicio Federal de Seguridad ruso (FSB, la antigua KGB).
«El FSB añadió que le fueron descubiertos equipos técnicos especiales, instrucciones para el ciudadano ruso que quería reclutar, así como una importante suma de dinero y objetos que le permitían modificar su apariencia».
Las televisiones rusas mostraron imágenes de la detención, con el hombre con las manos tras la cabeza y sujetado en el suelo por los agentes rusos. También mostraron fotografías del material incautado y extractos de una carta presentada como dirigida al potencial espía. «Estamos dispuestos a ofrecerle 100.000 dólares y a discutir sobre su experiencia y una colaboración. Podemos ofrecer hasta un millón de dólares por un año de colaboración a largo plazo», se podía leer. La suma ha hecho que algunos expertos ironicen sobre la alta categoría que debía tener el espía reclutado.
El detenido fue puesto en manos de la Embajada según «los procedimientos necesarios», informó el FSB, que señaló que «en los últimos tiempos el espionaje americano ha intentado en varias ocasiones reclutar colaboradores de las fuerzas del orden y de los servicios secretos rusos».
Además, el Ministerio de Exteriores declaró a Ryan Fogle persona non grata y exigió su partida en el plazo más breve posible.
«Cuando nuestros presidentes han declarado su voluntad de cooperar a través de los servicios espeicales en la lucha contra el terrorismo, estos actos provocadores del espíritu de la guerra fría no contribuyen a reforzar la confianza mutua», añadió .
Las relaciones ruso-estadounidenses se encuentran en su peor momento desde la vuelta al Kremlin de Vladimir Putin -quien fue agente del KGB- hace un año para su tercer mandato. Putin no ha dejado de acusar a Estados Unidos de financiar a la oposición y a las fundciones políticas que denuncian fraudes electorales.
Estas fundaciones han sido objeto de controles durante las últimas semanas tras la adopción de una ley que les obliga a inscribirse en un registro de «agentes extranjeros» si reciben financiación extranjera y tienen una actividad política.
El término era usado por las autoridades soviética para calificar a los disidentes acusados de estar a sueldo de Occidente.
El ministerio ruso de Asuntos Exteriores convocó al embajador estadounidense en Moscú, Michael McFaul, quien al ser preguntdo por si confirmaba o desmentía el incidente respondíó a través de Twitter con un lacónico «no».