Los grupos que componen la oposición al Gobierno de Javier Maroto en el Ayuntamiento de Gasteiz sumaron ayer sus votos para reprobar a la concejal de Seguridad Ciudadana, Marian Castellanos. Una edil que, según explicaron, «mintió y ocultó información» sobre el coste real de la gestión del plan de nevadas, que supuso un desembolso de 580.000 euros. Cantidad que dista mucho de los 320.000 euros declarados en abril por la responsable del área.

En el debate previo a la aprobación de la medida, presentada como una «tarjeta amarilla» por los asistentes al Pleno, el portavoz del PNV, Gorka Urtaran, acusó a Castellanos de «faltar a la verdad», y recordó que «el que engaña una vez te puede engañar siempre». «La mentira es una mala compañera de viaje», añadió el jelkide.

Marian Gutiérrez (PSE) también puso en duda la credibilidad de la edil, a la que acusó de mentir en dos ocasiones: la primera al dar una cifra incorrecta sobre el coste de las nevadas, y la segunda al comparar su gestión con la respuesta dada por el Gabinete del PSE a las precipitaciones del año 2010.

Desde Bildu, David Pina, que cargó contra Castellanos por «falsear datos, mentir y ocultar información a los grupos», denunció que el gasto en el plan de nevadas fue «indecente y desproporcionado». «La ciudad no puede estar limpia a cualquier precio», destacó.

Idoia Garmendia, en representación del PP, defendió que la concejal ya pidió perdón en comisión, y subrayó que, a su parecer, la reprobación no está justificada.