El Ibex logró avanzar en la jornada de ayer un 1,27%, hasta los 8.582,50 puntos. Lo hizo, además, con un viento en contra fuerte alimentado por los malos datos económicos de la eurozona y la prima de riesgo peleándose por evitar los 300 puntos. Los índices europeos, aunque con menor entusiasmo, también registraban subidas. Fráncfort ganó un 0,28%, París, un 0,51%, y Londres, un 0,76%. La caída del 0,2% en el PIB del Estado francés el primer trimestre -segundo retroceso consecutivo- y el débil comportamiento del crecimiento alemán -subió un 0,1% frente al 0,2% previsto- trajeron inquietud a todos los mercados. En su conjunto, la eurozona se contrajo un 0,2% de enero a marzo y encadena seis trimestres seguidos en negativo. Menos mal que la prima de riesgo, tras amenazar con quedarse sobre los 300 puntos, se deslizó a la baja por la tarde hasta acabar en el nivel de inicio de la jornada. También echaban una mano en esta lucha contra el pesimismo generado por la galopante recesión de la eurozona los índices de Wall Street, que no dejan de sumar récords históricos. Dentro del Ibex, la banca fue la gran protagonista. Bankinter, Sabadell y Popular se anotaban más de un 4%; y los dos grandes bancos, BBVA y Santander, subían un 0,97 y un 1,69%, respectivamente. El resto de pesos pesados ganaba en torno al 1%. Entre los cuatro únicos perdedores, el peor fue Técnicas Reunidas (-0,36%). En París, los más castigados de la sesión fueron Vivendi y Gemalto al ceder más de un 1%. Por el contrario, Renault (+4,66%), Crédit Agricole (+3,90%) y Accor (+2,56%) alcanzaban los mayores avances.