Vincenzo Nibali distanció en el final en alto de Jafferau de la decimocuarta etapa del Giro a todos sus rivales y permitió ganar a Mauro Santambrogio (Fantini), que fue el único que aguantó la rueda del líder. Por detrás llegaron Betancur, Samuel Sánchez -que asciende a la decimoséptima plaza de la general-, Urán y Evans, que tendrán que marcarse el objetivo de defender la plaza de podio por la superioridad clara de Nibali.

Beñat Intxausti perdió 1:24 y bajó hasta la décima posición en el final de una etapa durísima por la lluvia, la nieve y el frío a pesar de la suspensión de la subida a Sestriere por la meteorología adversa. También el recorrido de la etapa de hoy con final en el Galibier será modificado y hasta esta mañana no se conocerá a qué altura se sitúa la meta y el recorrido previo.

A última hora de la tarde de ayer la decisión que se tomó fue que la llegada se iba a situar a 2.301 metros de altitud y a cuatro kilómetros de la cima tras unas previsiones más optimistas que las de la mañana, que habían llevado a anunciar que la meta se iba a colocar en Les Verneys, a 1.562 metros de altitud.

Si se confirma la previsión vespertina, la meta se instalaría junto a la estela de Marco Pantani, al que se quería homenajear en la etapa de hoy al cumplirse el decimoquinto aniversario de su doblete Giro-Tour tras un ataque en el Galibier.

Tanto en lo referente a la llegada como a la subida del Mont Cenis, que también supera los 2.000 metros y cuya ascensión fue anulada en principio y neutralizada después, la decisión definitiva se tomará esta misma mañana en función de la evolución meteorológica.

A pesar de la mejoría de las previsiones, Eric Jalon, responsable de la prefectura de Saboya, advirtió a los responsables del Giro que «hasta el domingo a la mañana una anulación de la prueba no está descartada». Entre la subida del Mont Cenis y el Galibier estaba prevista la del col de Telegraphe, que no plantea problemas.

Samuel va a más

A Samuel Sánchez le interesaría que la etapa se parezca lo más posible a la prevista porque el líder del Euskaltel mostró que va a más y acabó cuarto en un final duro al que se redujo el interés de ayer. En la parte inicial se registró una escapada en la que la pena para Euskaltel fue que Egoi Martínez no pudo mantenerse en un grupo de siete corredores de los que solo quedaron en cabeza los cuatro italianos: Colbrelli (Bardiani), Paolini (Katusha), Pietropolli (Lampre) y Trentin (Omega).

Paolini y Colbrelli fueron los más fuertes de la fuga y solo fueron atrapados en el último kilómetro después de que Nibali lanzara un ataque que solo encontró la respuesta de Santambrogio, que luego aceleró para buscar la etapa. El líder aguantó su rueda y no quiso disputar la victoria más importante del líder del Fantini después de muchos años de trabajo para los demás, los últimos años para Cadel Evans en el BMC. Le faltó un segundo para desbancar a Urán de la tercera plaza tras aprovechar el mal día de Scarponi, que ahora es quinto.