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Campeonato Manomanista

Aimar se refugia en el saque

Inferior en el peloteo a un buen Barriola, el campeón pasó gracias a sus ocho tantos con el pelotazo inicial.

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OLAIZOLA II 22

BARRIOLA 16

Jon ORMAZABAL

Nunca ha sido un consumado especialista con la jugada inicial, pero el vigente campeón tuvo ayer la virtud de saber refugiarse en el saque para solventar una papeleta tan complicada como la del Labrit ante un buen Abel Barriola. Incómodo en la cancha e inferior en el peloteo en las contadas ocasiones en las que los tantos se alargaron, los ocho tantos directos, los tres de saque-remate y la falta cometida por su rival sirvieron a Aimar Olaizola para clasificarse para semifinales por novena vez en su carrera, donde se medirá a Mikel Urrutikoetxea, si no hay aplazamiento, el próximo sábado en el Bizkaia.

Por contra, el que debía ser uno de los argumentos más sólidos de Abel Barriola en su intento de superar a la lógica se convirtió en el comienzo del fin de sus opciones. Primero, porque además de solo hacer un tanto directo, cometió una falta por pasa con la que perdió el 5-0 con el que se había adelantado de salida y, sobre todo, porque no supo cómo restar los bien dirigidos saques de su rival. Alternó los restos a bote y a aire, pero sin conseguir cerrar el boquete que se le abrió con la jugada inicial. Para colmo, en la mayoría de los buenos restos que logró conectar -llegó a lograr un tanto- Olaizola II, sin ganas de alargar el tanto, lo castigó cruzando grandes ganchos desde el tres y medio y el cuatro solo al alcance de los elegidos.

Superior a bote

Y es que, el campeón se vio obligado a arriesgar, porque desde el primer momento se le vio algo falto de chispa y, sobre todo a bote, la pelota no le salía con velocidad de su mano. Todo lo contrario que un Abel Barriola al que, pese a los problemas que ha pasado en su derecha, se le vio con un golpe muy fresco.

No obstante, una falta de saque del zaguero le dio la iniciativa del tanto al de Asegarce que, con su pelota, logró ponerse 6-5 por delante sin apenas pelotear. Recobró la iniciativa el de Aspe, recuperando una renta de cuatro (6-10), pero teniendo que trabajar mucho más los tantos.

Con de nuevo el saque como gran aliado, Olaizola II encadenó otro 0-6 de parcial con el que recuperó una ventaja que nunca más perdió. Sin jugar bien y dejando alguna duda, el de Goizueta superó el siempre complicado debut, en el que ya sufrió el año pasado ante Retegi Bi.

 

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