Final de la Copa Juvenil en Almería
A seguir creciendo
Los cachorros rojiblancos se enfrentan al difícil Real Madrid (20.00, ETB1) tras dejar en la cuneta al Barcelona y al Atlético.
Joseba VIVANCO
«Al final, el técnico de formación tiene que mirar más por los jugadores que por el equipo. Muchas veces y cuando me refiero a eso, es porque muchos de los técnicos de formación se tienen que `comer' los errores de los jugadores. Si tienes un delantero centro joven con una perspectiva de futuro importante, tendrás que ir puliéndolo poco a poco y a veces vas a tener que perder partidos para que ese jugador se haga, eso va en perjuicio del propio entrenador, del que cuenta el resultado, pero no va en perjuicio del entrenador de base, porque el resultado que tiene que contar no es el resultado del domingo, sino que el jugador sea mejor». La reflexión es del actual entrenador del primer equipo, Ernesto Valverder, en una entrevista concedido al poco de hacerse cargo del Espanyol en 2006.
Esta tarde, los juveniles rojiblancos se juegan un nuevo título, el de Copa, ante otro club con solera y rival histórico, el Real Madrid. Un triunfo sería recibido con enorme satisfacción en una campaña decepcionante del Athletic, donde el filial se ha quedado por los dichosos penaltis en puertas de un anhelado ascenso y el femenino ha perdido en casa la Liga. Sin embargo, no hay que olvidar siquiera ante citas de este calado, que el objetivo último de Lezama es que alguno o algunos de estos jóvenes cachorros puedan un día nutrir al primer equipo. Formar jugadores y personas por encima del resultadismo. «La gente paga por verles a ustedes, qué menos que presentarse con un aspecto decoroso», les exigía con enseñanza castrense José Luis Garay, el artífice de que los primeros juveniles de Lezama ganaran cinco de las siete finales coperas jugadas entre 1962-63 y 1969-70.
El Juvenil que hoy se juega en Almería un nuevo entorchado simboliza ese trabajo de cantera labrado los últimos años en Lezama, de formación de jugadores pero también de entrenadores que constantamente se hacen preguntas para mejorar ellos mismos. Trabajar no para ganar, sino para mejorar. Viajar a Almería para seguir compitiendo como contra el Barcelona o el Atlético, porque con esa filosofía los resultados llegan y quizá sea hoy mismo. «Disfrutad, y si se gana, pues mejor», aleccionaba Jabo Irureta a los alevines en el vestuario su primer día en Lezama.
A por la décima
Será la 17ª final juvenil en la historia del Athletic desde 1950 y podría ser su décimo título copero. Será ante un Real Madrid al que se ha medido en seis finales, al que le ganó la última vez hace tres años en Almuñecar y que lleva desde 1993 sin levantar este trofeo. Así pues, alicientes suficientes para que los de Gontzal Suances, una prometedora camada de cachorros, reverdezca laureles en una categoría en la que los rojiblancos se meten en una final de Copa por tercera vez en los últimos cinco años, señal de que las cosas se están haciendo bien.
El brasileño Martim Francisco, a la sazón técnico del primer equipo, fue el primer entrenador del juvenil bilbaino, entre 1958 y 1961. El 2 de octubre de 1960 debutó de forma oficial ante el Zubibarri, con un once formado por: Zamora, Arriola, Legarreta, Goikoetxea, Ochoa, Uriarte, Izagirre, Ariño, Unamuno, González y Del Campo. Ganaron 4-0 y el carioca les pagó una prima de su bolsillo, como se recoge en el libro ``Lezama. El corazón del Athletic'', editado por el club en 2011.
El férreo -hoy sería tachado de `bielsista'- José Luis Garay se haría cargo de la categoría para primero ser subcampeón copero y después llevarse el título cinco años seguidos. De aquellas camadas llegarían al primer equipo gente como Aranguren, Uriarte, Arieta, Zugazaga, Estéfano, Rojo, Deusto o Clemente.
En la campaña 69-70 llegaría un nuevo entorchado, el subcampeonato al año siguiente, y una sequía que acabó en 1984, al ganar al Castilla -habían perdido la del 80-81 ante los merengues con un gol ilegal de un joven Michel, que entró por el lateral de la red de Iru-, en un equipo donde figuraban jugadores como Aiarza, Ferreira, Lizarralde, Roberto Martínez o Ayúcar. Entre medias, nació la Liga Nacional Juvenil, en 1976, cuando en aquel equipo formaba gente como Txema Noriega.
Nueva travesía copera en el desierto hasta el curso 91-92, de la mano de José Mari Amorrortu y la victoria a penaltis ante el Betis. Un frío helador, dos mil aficionados rojiblancos en las gradas de Los Pajaritos, un gol de un ya prometedor Julen Guerrero y un once formado por: Gorbea, Ruiz Otxoa, Txutxi, Karanka, Larrinoa, Lambea, Edu Martínez, Andrés Martínez, Corino, Huegun y Guerrero, además de Suances y Gorka Bizaurrazaga, que también jugaron.
Fue la última copa antes de la conseguida en la reciente campaña 2009-2010, ante el Madrid, y después de haber perdido ante el Sevilla la anterior en la prórroga. Almuñécar vio desquitarse a los cachorros que jugaron con Magunazelaia, Aurtenetxe, Eguaras, Jonxa, Bilbo, Ramalho, Guillermo, Villar, Saborit, Ruiz de Galarreta y Peña, además de Bustinza, Altamira, Alkuaz y Jonan García.
Otro ramillete de prometedores jugadores tratará de seguir su estela a partir de las 20.00, en Vera (Almería), televisado por ETB1 y Marca TV. Liderados por el diapasón de Unai López, la contundencia atrás de Yerai, sus profundos laterales, el desequilibrio de Yanis y Jurgi Oteo, o los goles de Iñaki Williams, el Athletic no lo tendrá nada fácil ante el Madrid. Pero el Madrid tampoco ante el Athletic.
Apenas cinco días después de iniciar la pretemporada, el Athletic jugará su primer amistoso frente al Bermeo en Itxas Gane, ante la solicitud del Ayuntamiento y de diferentes asociaciones, para colaborar con la reconstrucción de los daños del incendio.
La crónica de unos fichajes anunciados sigue a buen ritmo. Ayer, el Athletic confirmó que ha decidido ejercer la cláusula que le permitía recuperar al jugador Mikel Balenziaga, cedido en el Real Valladolid. El nuevo compromiso tendrá vigencia hasta el 30 de junio de 2016 y la cláusula de rescisión será de 30 millones de euros. De esta manera, Ernesto Valverde contará con un refuerzo en el lateral zurdo, el mismo puesto que Bielsa solicitó apuntalar hace un año, pero sin suerte. Dura competencia para Aurtenetxe, sobre todo porque Balenziaga tiene una mayor tendencia a subir la banda y llegar arriba, como le gusta al nuevo técnico. El de Zumarraga fue el tercer jugador con más minutos en el Valladolid la pasada campaña, 2.993; solo cuatro leones sumaron más que él.
Otro que llega, o mejor retorna, y será presentado seguramente el lunes en Ibaigane es el central Xabi Etxeita, que regresa libre del Elche, y que vendrá a reforzar el eje de una zaga que no ha terminado de cuajar la pasada campaña. Además, este curso pasado el de Zornotza ha aportado goles con los ilicitanos, cualidad que se echó en falta en los centrales de Bielsa. J.V.