La presidenta de UEMA, Maren Belastegi, compareció en Donostia acompañada por la alcaldesa y una concejala de Bera, Marixol Taberna y Garazi Taberna, y concejales de otros municipios que forman la mancomunidad, como Gari Berasaluze (Zarautz), Andone Salbarredi (Leitza) y Miren Urkola (Tolosa).

Resaltó que la fotografía de Nafarroa es «muy preocupante», ya que ninguno de los catorce municipios de la mancomunidad dispone de recursos para ofrecer el servicio sanitario básico en euskara. De siete pediatras, cuatro no saben euskara. Comentaron la situación de Bera, donde todos los habitantes se ven obligados a hablar en castellano tanto con los médicos como con el pediatra. Además, la mayoría de los suplentes en este herrialde son castellanoparlantes y, así, en Baztan han enviado un médico erdaldun para cubrir la plaza de un euskaldun, provocando el enfado de la ciudadanía. Al respecto, UEMA se reunió con Osasunbidea y, aunque hubo «buena sintonía», echa en falta pasar de las palabras a los hechos.

En Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, el 75% de los trabajadores de Osakidetza no tiene certificado el nivel de euskara solicitado. De los 57 municipios de UEMA, 28 todavía tienen problemas en los servicios básicos de salud y los casos más graves están relacionados con los pediatras. En Azpeitia, Aduna, Oñati, Deba, Lekeitio, Oiartzun, Usurbil y Aramaio ningún pediatra cumple el requisito lingüístico.

Ante el nuevo plan del euskara de Osakidetza, la mancomunidad pide tener «muy en cuenta» los municipios euskaldunes. Considera necesario y urgente garantizar todos los servicios en esta lengua y afirmó que seguirá trabajando para ello reuniéndose con Osakidetza, Osasunbidea y otros organismos.