A cuatro días para el arranque festivo, la decisión que adopte finalmente el Juzgado de lo Contencioso Administrativo nº 1 de Bilbo respecto al nombramiento de Jone Artola como txupinera mantiene en vilo al Botxo, pero el veto del Gobierno español ya ha enrarecido el ambiente. Lo confesó ayer la concejal de Fiestas, Itziar Urtasun, para quien no obstante la suspensión cautelar decretada a instancia del delegado del Gobierno español en la CAV, Carlos Urquijo, supone «un contrapié más».

La reacción timorata del PNV sorprende, especialmente por la intromisión que supone en la autonomía municipal y sus consecuencias en la cercana Aste Nagusia. Los jeltzales evitan la denuncia política aunque reconocen que el móvil del recurso de Urquijo es político.

La oposición ha instado al Gobierno Azkuna a efectuar algún tipo de declaración sin éxito. La posponen, apuntan fuentes municipales, para cuando se conozca la resolución judicial definitiva y se apuesta ahora por la presentación de alegaciones -el plazo finaliza hoy- en las que explicarán el procedimiento que se sigue desde 1978, añadiendo que sobre Txori Barrote o la propia Artola no pesa ningún tipo de prohibición. Bilboko Konpartsak puede que presente las suyas al ser parte interesada.

«Las comparsas nos dicen que este año le toca elegir a esta comparsa la txupinera y nosotros siempre lo damos por bueno porque siempre ha sido así», manifestó ayer Urtasun, que añadió que «evidentemente» cumplirán la decisión del juzgado. La corporativa jeltzale confía en que la respuesta «sea lo más prontaoposible» ya que el txupinazo festivo es el sábado a las 19.00 en el teatro Arriaga y Marijaia no espera. Agentes festivos y Ayuntamiento se muestran convencidos de que el juez les dará la razón.

Para analizar la situación, ha convocado para mañana una Comisión Mixta de Fiestas, en la que se explicará el contenido de las alegaciones y se abordarán los pasos a dar. Será buen momento para que el PP aclare por qué ahora se opone a la designación de Jone Artola cuando en julio no dijo nada.

Ayer su portavoz, Cristina Ruiz, acusó al PNV de «nadar y guardar la ropa» en lo relativo a la elección de Artola, instando a que las comparsas dejen de elegir a la txupinera y se acabe con el modelo de Aste Nagusia que promovieron esos agentes festivos hace 36 años.

No habrá otra txupinera

Precisamente las comparsas se concentrarán hoy, a las 12.00, en la plaza del Arriaga en defensa de Aste Nagusia y de sus iconos festivos, especialmente la txupinera. «Lo más importante es pedir -explicó Itziar Villafáñez, portavoz de Bilboko Konpartsak- que se deje de utilizar Aste Nagusia para algo que no tiene absolutamente nada que ver».

Las comparsas reclaman respeto para la txupinera y su modo de elección: un simple sorteo entre aquellas que nunca han tenido ese honor y su posterior designación entre las componentes del colectivo festivo elegido. Lo que está claro es que Artola es la txupinera de 2013, por lo que no se contempla a otra persona que la sustituya. «Es una txupinera perfecta, superalegre, superenérgica. Es una comparsera de los pies a la cabeza», defendió Villafáñez.

Se muestran satisfechas de que una mayoría de los grupos políticos representados en el Consistorio, con la excepción del PP, legitimen el modelo festivo actual y el papel que juegan en él las comparsas. La impugnación auspiciada por Urquijo no ha hecho sino desviar la atención sobre su objetivo, engrandecer más Aste Nagusia.