«Enfocamos el grupo hacia el indie o el pop. Hoy en día son estilos que nos fascinan»
Voz y guitarra de Kometa
No es habitual, diríamos incluso que es singular, que surja una banda euskaldun en Viana y con una propuesta tan perfilada, cuidado melódico y tanto power-pop de corte indie metido entre nítidas melodías y guitarras saturadas. Kometa es el trío que afronta este momento de la historia con un primer álbum de ocho canciones vivenciales, bailables y sutiles.
Pablo CABEZA | BILBO
Kometa (antes Smoking Hill) debuta con «Kometa», un disco pop con sus momentos intimistas y espacio para los ritmos medios y bailables. Podrían gustar a los seguidores de Kauta, Berri Txarrak por algunas melodías, Lauroba o Ken 7. El problema es saltar la valla del anonimato, que los medios escritos reflejen el potencial del disco y que las radios se animen con cualquiera de sus ocho canciones. Todas son radiables y quedonas a nada que se les conceda tres o cuatro oportunidades. «Momentuari zai», «Non zara?», «Mentira» o «Ihesi» se prestan a tirar con fuerza del proyecto.
Andoni Bonafau (voz y guitarra, de Viana, 1989) se interesa desde muy pequeño por la trikitixa. Con 16 años se integra en Txakosu, donde interpreta canciones folklóricas de Euskal Herria. Poco después forma el grupo Besterik Gabe, orientado hacia el mundo de la verbena. Aquí empieza a tomar contacto con la guitarra, que le subyuga. Besterik Gabe compone la canción para el Nafarroa Oinez de Viana en 2007. Una vez disuelta la banda, conoce a Mikel (batería) y hasta hoy.
La afición de Mikel Gurrutxaga (azpeitiarra de 1990) por la batería comienza cuando de niño descubre una batería verde brillantina en el trastero de la casa de su abuelo, que fue tiempo atrás batería. Por los colores o por el ruido, el caso es que los dos comienzan un noviazgo. Con Días de Blankon inicia su etapa «sería». No obstante, el grupo de corte punk no dura demasiado. Andoni y Mikel se encuentran sin banda, Viana no es muy grande y terminan hablando de música y de un nuevo proyecto que rompa con su pasado, Kometa.
Juan Valdelana (Eltziego, 1992) siempre ha tocado el bajo. Eskroto Roto es el nombre de su primera banda, de corte punk. Después llega Hyperyakusya, que sorprende con una historia rock-surfer con influencias de bandas como Queens of the Stone Age o Surfin Kaos.
¿Se ve vida musical en Viana desde Kometa?
Siempre ha habido movimiento en el pueblo, por lo menos en lo que a rock/punk se refiere, y lo sigue habiendo. Hoy en día en activo estamos dos grupos, Ardelhatxa y nosotros. Y, además, hay como otros 2 o 3 que están empezando o simplemente tratando de encontrar su camino. Lo mejor de todo esto es que entre todas las bandas, o más bien músicos, tenemos una relación estupenda, y tratamos de ayudarnos mutuamente lo máximo posible, ya que hoy en día salir a tocar parece ser cada vez más complicado.
¿Es el primer grupo de Viana que graba disco, al margen de conocidas maquetas?
No, no somos la primera banda que graba un disco, ni siquiera los primeros que lo hacen en euskara. En Viana, desde siempre, ha existido un movimiento, en lo que a bandas de rock se refiere, bastante amplio. Por lo que nos cuentan (ya que nosotros no lo vivimos, somos muy jovencitos aún, o eso queremos pensar) en Viana existieron grupos punk como LSD o Iraultza. Estos ya hicieron sus peripecias por ahí, y, además, grabaron sus discos. Izana, si no estamos confundidos, fue el primer grupo vianés en grabar un disco en euskara.
Hay algo de punk en vuestra historia personal, pero no queda nada en Kometa, ¿qué raíces son las más próximas?
En nuestros orígenes (Smoking Hill) nos fijábamos mucho en grupos de Euskal Herria, como Berri, Kauta, Kerobia, Kuraia... También en alguno internacional como Nirvana, RATM... Y después llegaron Biffy Clyro que nos mola mogollón, The Killers, Muse, Two Door Cinema Club, Dinero, Supersubmarina, Jimmy Eat World, Death Cab for Cutie...
¿A qué época pertenece «Ihesi», una de vuestras mejores canciones?
No lo recuerdo. Junto con «Momentuaren zai» y «Non zara?» son temas tratados con mucho cariño durante el proceso de composición. Y, además, contamos con la colaboración de Mikel Morenos de Kauta. Grupo que siempre nos ha gustado muchísimo, por lo que fue un sorpresón cuando Mikel nos contestó diciendo que colaboraría con nosotros. En el estudio se nos ponía la carne de gallina escuchándolo cantar una canción nuestra. Esperemos que para el próximo Simon Neil [Biffy Clyro y Marmaduke Duke] nos dé el OK también.
Musicalmente no, pero vocalmente hay algo en las melodías a Berri Txarrak, ¿casualidad?
No es casual, no. Siempre nos ha encantado Berri Txarrak, bien por la música o por cómo la entienden. No tenemos nada que ver con su rock tan contundente, ya que nuestra idea era encaminar esto hacia el indie o el pop, incluso en algún futuro al electro... Pero en lo que a voz se refiere, no sabemos si es sin querer o queriendo, pero puede que en algunas ocasiones nuestras melodías se asemejen a las suyas... Algo que tampoco es malo, viendo las pedazo de melodías de voz que el gran Gorka compone. Así que nos lo tomaremos como un piropo.
¿Caminan por el pop indie, quizá por esas playeras, esas gafas de diseño?
Somos fans de las Converse, y cuanto más rotas ¡mejor! Quisimos enfocar el grupo hacia estilos como el indie o el pop. Hoy en día son estilos que nos fascinan. Sus ritmos alegres («tu chi ta chi») le dan mucha vida a la música y creemos, además, que la sociedad necesita ¡alegría! Somos un grupo que nos encanta innovar, que no nos gusta encasillarnos en un estilo. La idea de tirar más hacia el tecno y de empezar a enredar con sintetizadores nos mola mogollón [¿Y qué diría Simon Neil].
«No, no somos la primera banda que graba un disco, ni siquiera los primeros que lo hacen en euskara. En Viana, desde siempre, ha existido un movimiento, en lo que a bandas de rock se refiere, bastante amplio»