Un artefacto casero explota en la basílica del Pilar de Zaragoza
GARA | ZARAGOZA
Un artefacto casero fabricado con una bombona de cámping-gas provocó una fuerte explosión en la basílica del Pilar de Zaragoza sin provocar heridos, a pesar de que el templo estaba abierto al público en esos momentos, en una acción que los investigadores atribuyen a grupos de izquierda.
Fuentes policiales señalaron que se trata de un ataque similar al que se produjo el pasado febrero en la catedral de La Almudena en Madrid y que las primeras hipótesis apuntan a una acción de «extremistas radicales» con «conexiones con grupos anarquistas italianos».
El artefacto estalló sobre las 13.45 en el pasillo central de la nave donde se encuentra el altar mayor de la basílica, cerca del órgano. Unos minutos antes había sido colocado bajo uno de los bancos tapizados en rojo que bordean perpendicularmente el pasillo central.
Varios bancos rotos
La explosión rompió varios de los bancos de madera que se ubican frente al altar mayor pero no causó heridos al no haber ningún visitante cerca del lugar. Los servicios sanitarios solo atendieron a una mujer mayor que se quejaba de que le pitaban con fuerza los oídos.
La Policía desalojó la basílica y acordonó la plaza del Pilar y sus aledaños para comprobar si había otros artefactos en la zona. Permanecerá cerrada al menos hasta hoy para facilitar las labores de los investigadores, así como la limpieza y ventilación del templo.
La Policía trata de identificar a los autores de la acción a través de las declaraciones de testigos. Aunque intentó visionar las grabaciones de las cámaras de seguridad del interior y de algunas de las puertas de acceso al templo, estas no estaban en funcionamiento.
El concejal portavoz de IU en el Ayuntamiento de Zaragoza, José Manuel Alonso, afirmó haber a dos jóvenes salir a la carrera del interior de la basílica instantes después de producirse la explosión.