MANCHESTER CITY 1

BAYERN MÜNICH 3

El Bayern fue una auténtica apisonadora en el Etihad Stadium, mostrando sus credenciales para repetir en la consecución del entorchado del máximo torneo europeo de clubes. De paso, borró de un plumazo algunas dudas que se habían deslizado en el entorno de la entidad germana a cuenta de las nuevas ideas de juego implantadas por Pep Guardiola.

Lo cierto es que, a priori, el choque se presentaba más igualado, por aquello de que los ingleses jugaban en su feudo, pero los Ribéry, Robben, Múller y compañía se encargaron de poner las cosas en su sitio. Los teutones no solo fueron más verticales, sino que se hicieron con el esférico -Lahm continuó en la posición de pivote- y a los anfitriones no les quedó más remedio que correr detrás de la pelota durante casi todo el envite.

Aunque el técnico local, Manuel Pellegrini, se había encargado en la previa de dejar claro que el encuentro no era un duelo personal con el de Santpedor, la estadística volvió a dejarle en un mal lugar. Tras la derrota de ayer, el bagaje particular quedó en ocho victorias y un empate del lado del entrenador catalán. El Bayern ya pudo dejar sentenciado el partido para la media hora de juego, pero lo hizo en el primer cuarto de hora de la segunda parte.

Silva y Negredo

A buen seguro que al preparador chileno le hubiese gustado dar marcha atrás en el tiempo y reconsiderar el once inicial que puso en liza, pues los cambios que propuso para los últimos veinte minutos, al menos, le dieron otra cara a su equipo. Sin pilotaje en un centro del campo por el que hicieron kilómetros y más kilómetros Fernandinho y Yayá Touré, la entrada de Silva para poner algo de cordura y la de Negredo para materializar las pocas llegadas le dieron otro aire a los locales.

Hasta el punto que le metieron cierto miedo en el cuerpo al campeón, que se quedó con diez a falta de cuatro minutos para el final. Una gran parada de Neuer -inédito hasta el 77- y el larguero evitaron una voltereta que los citizens no se habían ganado en los otros 80 minutos.

El Real Madrid, más líder

La jornada también fue propicia para el Real Madrid, no tanto porque goleó a un correoso Copenhague, sino por el tropiezo de la Juventus en casa, que, tras remontar en el último cuarto de hora del encuentro -anotaron Vidal, de penalti, y Quagliarella- el gol a la media hora que consiguió Drogba, se dejaron empatar en la siguiente jugada por mediación de Umut Bulut.

En lo que se refiere al grupo C, el PSG lo comanda con mano de hierro, tras deshacerse del Benfica en jugadas de estrategia y con la participación estelar de Ibrahimovic, que anotó dos dianas. En el otro duelo, el Olympiacos de Michel consiguió una goleada con más ruido que nueces, gracias al acierto de su portero Roberto y su delantero Mitroglou, porque fue el Ander- lecht quien más méritos hizo.