Los jueces de instrucción que investigan el caso de supuesta financiación ilegal de la campaña electoral de 2007 del expresidente francés Nicolas Sarkozy desestimaron los cargos prestados contra el propio Sarkozy por las aportaciones realizadas por la heredera de la empresa L'Oréal, Liliane Bettencourt.

«Los jueces del tribunal de Burdeos finalmente han estimado que los cargos presentados contra Nicolas Sarkozy eran demasiado endebles como para motivar su procesamiento judicial», informó el rotativo «Sud Ouest» en su edición digital. Los magistrados Jean-Michel Gentil y Valérie Noël rechazaron derivar a un tribunal correccional el caso por el supuesto abuso de la debilidad mental de Bettencourt sin esperar a la decisión del Tribunal de Casación, ante el que Sarkozy había apelado para pedir la nulidad del proceso.

También fue liberado de la imputación el abogado Fabrice Goguel. Sin embargo, otros diez acusados -incluidos el ex tesorero de la campaña y posteriormente ministro de Trabajo, Eric Woerth; el fotógrafo François-Marie Banier; el empresario Stéphane Courbit y el exadministrador de la fortuna de la heredera de L'Oréal Patrice de Maistre- deberán comparecer ante el Tribunal de Gran Instancia de Burdeos en 2014.

La decisión del tribunal aclara la incertidumbre que pesaba hasta ahora sobre el futuro judicial y político de Sarkozy, de 58 años, quien podría presentarse como candidato en las elecciones presidenciales de 2017.

Las investigaciones contra él comenzaron en marzo, cuando fue acusado de aprovecharse del estado de demencia senil de Bettencourt, la mujer más rica del Estado francés, para lograr fondos para su campaña.