DEBATE SOBRE EL DERECHO A DECIDIR
Al Parlament, al Pueblo de Catalunya
Arnaldo OTEGI | Desde la prisión de Logroño
Al hilo de la propuesta que se me ha dirigido para participar en la Comisión sobre el Derecho a decidir del Parlament de Catalunya quisiera manifestar:
Mi agradecimiento público en primer lugar al gesto de confianza y solidaridad personal y política planteado por las CUP (y apoyado por Esquerra) con su propuesta. Deseo enviar un abrazo y todo mi apoyo y cariño personal tanto a sus diputadas/os como al conjunto de sus militantes y a la totalidad del Movimiento Independentista de Catalunya.
En cuanto al propio contenido de la propuesta, quisiera destacar que ha sido y tratará de ser instrumentalizada en términos de manipulación política y mediática con el objetivo de tratar de alcanzar al menos los siguientes objetivos:
- Vincular el escrupuloso proceso democrático que desarrolla el Pueblo Catalán con un proceso como el de Euskal Herria que ha venido marcado por diferentes expresiones de violencia.
- Fomentar la división de las fuerzas políticas, sociales y sindicales que impulsan el proceso de autodeterminación de Catalunya.
- Desviar la atención sobre el debate político real, que no es otro que el Derecho de Autodeterminación de Catalunya y el de todas las naciones a decidir libre, pacífica y democráticamente su futuro.
En este contexto, nada hay más lejano a mi voluntad que la de ser protagonista de un proceso que solo corresponde protagonizar a los propios ciudadanos/as de la nación catalana. No seré yo quien me convierta en «instrumento» de quienes, careciendo absolutamente de razones de carácter democrático, solo tratan de obstaculizar vuestro proceso de autodeterminación nacional. Esta sería ya una razón suficiente para que renunciara a mi colaboración con la comisión... Pero existe todavía una razón más poderosa para hacerlo: he tenido conocimiento (a través de los medios) de que, con la misma legitimidad con que las CUP y Esquerra consideran positiva mi participación, el resto de fuerzas que también apoyan el proceso soberanista (y por supuesto quienes no la apoyan) han mostrado serias reservas o su oposición a mi participación. Esas fuerzas representan hoy a la mayoría del Parlament de Catalunya... y yo, por un elemental criterio de coherencia política, no puedo sino respetar ese criterio mayoritario. Creo sinceramente que aquí y ahora esa es mi mejor aportación y por eso he decidido no participar en los trabajos de la comisión.
Ahora espero que todos respeten de igual manera y con el mismo espíritu democrático todas las decisiones (incluida la Independencia) que adopten en el futuro tanto el Parlament como el Pueblo de Catalunya.
Con el deseo de que los trabajos de la comisión sean fructíferos, os envío un gran saludo.