«Somos los Miller» funciona cuando luce su humor más irreverente, pero se atasca al ponerse sentimental. Esta esquizofrenia parece afectar de lleno a Rawson Marshall Thurber, un cineasta que debutó en la comedia gamberra con «Cuestión de pelotas», para luego ponerse serio dentro del cine independiente con «Los misterios de Pittsburgh», adaptación de una novela de Michael Chabon. Es como si el realizador no supiera muy bien con que carta quedarse, obligando a Jennifer Aniston a hacer de chica golfa y mujer romántica a la vez.

Ella es una stripper contratada por su vecino, un camello de poca monta, para formar una falsa familia con la que viajar en una autocaravana para pasar la frontera mexicana con un cargamento de marihuana, sin levantar sospechas. El primer guión fue escrito ya hace diez años atrás por Bob Fisher y Steve Faber, pudiendo pasar por una versión cómica del drama de Fernando León de Aranoa «Familia».

Jennifer Aniston forma pareja con Jason Sudeikis, a los que se suman Emma Roberts y Will Poulter como los supuestos hijos. El actor cómico Ed Helms es el caricaturesco villano de la función, un tráficante que tiene en su despacho un acuario con orcas.