El tráfico de mercancías en el Puerto de Pasaia descendió un 5,4% en 2005
El «extraño» comportamiento en el mercado siderúrgico mundial, el cierre de la terminal de la empresa CLH y la construcción del nuevo silo de automóviles son las principales razones por las que, según la Autoridad Portuaria, el Puerto de Pasaia ha registrado un descenso del 5,4% en el tráfico de mercancías en 2005. Se manipularon 5,3 millones de toneladas en total, una cifra que sus responsables consideran «normal» dado «el límite de espacio» de las instalaciones.
PASAIA
El Puerto de Pasaia movió 5.364.424 toneladas de mercancías en 2005, valoradas en 6.350 millones de euros, lo que supone un 5,4% menos que el año anterior, debido a las «dificultades» del mercado siderúrgico mundial y al cese de actividad de la empresa CLH. En cualquier caso, el presidente de la Autoridad Portuaria de Pasaia (APP), José Ignacio Espel, señaló que la fluctuación entre cinco y seis toneladas es «lo normal» y añadió que «todo lo que sea estar por encima de las cinco toneladas de mercancías manipuladas está bien para el Puerto», dado su «límite de espacio».Espel presentó los resultados económicos obtenidos por la dársena guipuzcoana el año pasado, en una rueda de prensa en la que también participaron los directores general y comercial de la APP, Goyo Irigoyen y Fernando Aizpiri, respectivamente. Espel explicó que este descenso del 5,4% «se encuentra dentro de lo previsto» ya que 2005 fue un año «atípico» debido al cierre de la terminal de la empresa CLH, dedicada al tráfico de graneles líquidos, así como a «las dificultades que atraviesa el mercado del acero a nivel mundial» y al desvío temporal de tráfico de vehículos a otros puertos, mientras la compañía UECC construía su nuevo aparcamiento en Pasaia. Esta nueva instalación, de 90.000 metros cuadrados, ha duplicado la superficie disponible anteriormente para el estacionamiento de coches, con lo que para este año se prevé un aumento «considerable» en el tráfico de vehículos, ya que UECC ha encargado la construcción de cuatro nuevos barcos para operar especialmente con automóviles en Pasaia.
Buenas expectativas
Estos nuevos barcos también permitirán embarcar camiones en otros países y traerlos hasta el Puerto, del que saldrían por carretera o en tren, con lo que se potenciaría esta vía como una «autopista del mar», y se descongestionarían los pasos entre Gipuzkoa y Lapurdi. De hecho, José Ignacio Espel espera que 2006 cumpla «sobradamente» las buenas expectativas que anuncian los resultados de los dos primeros meses de este año, si bien insistió en que actualmente el Puerto opera «al límite de su capacidad» y no puede trabajar con contenedores ni con graneles líquidos por la falta de espacio y por la peligrosidad que entrañan estas últimas mercancías en un entorno muy poblado. Por eso, abogó por crear una dársena exterior junto a los acantilados del monte Jaizkibel, al tiempo que recordó que el Puerto da empleo a unas 4.700 personas e indicó que los ingresos de la APP en 2005 ascendieron a 13.500.000 euros. Al igual que en años anteriores, las principales mercancías que se movieron en 2005 en las instalaciones de Pasaia fueron las siderúrgicas que, con 3,3 millones de toneladas, registraron un ligero incremento de un 1,1% respecto a 2004 y supusieron el 61,64% del total, según indicó Goyo Irigoyen. Otros productos de relevancia fueron el carbón, con 748.833 toneladas; los automóviles, con 299.865; los cereales, con 209.942; los abonos, con 191.750; los materiales de construcción, con 149.842 y la madera, con 81.582 toneladas. Destacó la subida de los cereales, más de un 162%. José Ignacio Espel recordó, además, que Pasaia sigue siendo en parte un puerto pesquero, aunque esta actividad ha acusado «la crítica situación por la que atraviesa el sector, con graves problemas como el de la desaparición de gran parte de las reservas de anchoa y los cierres de los caladeros», lo que ha motivado un descenso del 9% respecto a 2004.
Espel defiende un puerto en forma de isla
GARA
PASAIA El presidente de la Autoridad Portuaria de Pasaia (APP), José Ignacio Espel, manifestó ayer que las obras de la dársena exterior guipuzcoana comenzarán en un plazo máximo de dos años y apostó por el proyecto que contempla la construcción de un puerto en forma de isla separada del monte Jaizkibel, una propuesta a la que se oponen mayoritariamente los vecinos de la zona. Espel hizo estas declaraciones durante la rueda de prensa de presentación de los resultados económicos obtenidos por el Puerto de Pasaia el año pasado. El presidente de la Autoridad Portuaria de Pasaia aseguró que cualquiera de los tres proyectos existentes para la ampliación del puerto le parece bien, y admitió que, aunque desde el punto de vista portuario preferiría el de mayor superficie pegado a los acantilados de Jaizkibel, como residente en la comarca de Pasaia optó por la creación de un puerto isla separado de este monte. «Esta solución es muy aceptable para nosotros», subrayó José Ignacio Espel, quien consideró que para llevarla a término sólo es preciso «adecuar los estudios» que ya se han hecho para el anterior proyecto.
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