MENDARO
La gerencia del Hospital de Mendaro reconoció el «error humano» tras el intercambio de bebés producido entre dos familias, que fue descubierto a las dos horas, momento en el que «se pusieron en marcha todos los mecanismos de comprobación previstos en estos casos», según explicó.
Aseguró que una vez se tuvo la certeza de lo ocurrido, se subsanó el problema y se pusieron los hechos en conocimiento de las familias, «que hasta entonces no se habían percatado del cambio». El centro añadió que «las familias entendieron las explicaciones y pruebas expuestas, y aprobaron la resolución». No obstante, se procedió a la realización de la prueba de ADN, cuyos resultados fueron definitivos.
El Hospital expresó su deseo de que «situaciones similares no vuelvan a repetirse» y su «certeza de la profesionalidad de los trabajadores sanitarios y de la calidad de la asistencia proporcionada».
En un comunicado, los responsables del centro explicaron que, «a pesar de que el nivel profesional de sus trabajadores es muy alto», deben prever «la posibilidad de error». En este sentido, aseguraron que sus planes de calidad están «lo suficientemente definidos como para detectar y controlar de la forma más inmediata posibles errores».
El centro hospitalario comunicó su «absoluto deseo» de que situaciones similares no vuelvan a repetirse, y lanzó «un mensaje de tranquilidad y confianza en la eficacia de las instituciones sanitarias de Osakidetza a toda la población».
