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Gara > Idatzia > Kirolak > FUTBOL 2007-01-03
José Manuel ESNAL, "MANE" | Entrenador del Athletic
«Hemos salido de la UVI, pero seguimos en cuidados intensivos»
El panorama ha cambiado por completo con la llegada de Mané al Athletic. Más allá de los siete puntos obtenidos en cuatro partidos, ha conseguido levantar el ánimo de la afición rojiblanca y recuperar cierta tranquilidad para poder trabajar. El entrenador de Balmaseda, en cambio, reconoce que todavía falta mucho por hacer y considera que este mes de enero será clave para el futuro de su equipo. Como ya dijo el día de su presentación, le gustaría sufrir menos que la temporada pasada.

El Athletic ha disfrutado de unas navidades tranquilas gracias al paso adelante que ha dado en los últimos partidos coincidiendo con la llegada de Mané al banquillo. Algo que parecía prácticamente impensable hace tan sólo un mes.

­¿Qué hay de cierto en el demoninado «efecto Mané»?

Siempre hay que poner nombres propios a las cosas, pero en un deporte de equipo no es lo fundametal, porque hay que repartir entre todos aciertos, errores o que vayan mejor o peor las cosas. Los que tienen cargos de más responsabilidad tienen más responsabilidad, pero sobre todo en las cosas que no salen bien.

­De lo que no hay duda es de que en cuatro partidos ha conseguido cambiar las sensaciones que ofrecía el equipo, tanto fuera como dentro del campo...

Los resultados son los que traducen las aguas turbulentas en aguas plácidas durante la competición. Si eso coincide con la llegada de un cuerpo técnico se le atribuye una cierta dosis de acierto, por decirlo de alguna manera, en esos resultados. Sin embargo, repito que en un deporte de equipo no puede ser que sea una persona la responsable de que vayan bien o mal las cosas, hay que repartir entre todos.

­Antes de que accediese al cargo de entrenador del Athletic seguía sus evoluciones en los partidos, ya que acudía habitualmente a San Mamés. ¿Qué ha cambiado en el campo en el mes que lleva al frente del conjunto rojiblanco?

Hemos tratado de marcar unas líneas de trabajo y de forma de jugar. Todavía no está mecanizado, pero sí que hay una línea de trabajo diferente. Estamos tratando de ejecutar un juego con desplazamientos más largos, ocupación masiva en ciertos sectores del campo y una intensidad más alta en la disputa del balón. Esa es la principal diferencia con respecto a la anterior forma de trabajar.

­Llegó con las ideas claras y desde el primer día anunció que el objetivo número uno era tratar de evitar la cantidad de goles que recibía el equipo...

Me imagino que los que estaban aquí antes también tenían las ideas claras. Nosotros tenemos ese concepto de formulación del trabajo para sacar resultados. Hay muchas otras formas, todas válidas, pero nosotros hemos apostado por ésta porque creemos que a día de hoy, con este equipo y en la situación que estaba, es la adecuada. Eso no quiere decir que las demás no lo sean, pero desde nuestra perspectiva quisimos encarar así el problema.

­Desde fuera da la sensación de que se intenta hacer las cosas fáciles, tapando las debilidades del equipo y potenciando los puntos fuertes, por ejemplo el juego aéreo, al contar con un jugador de las características de Urzaiz...

La idea de todo entrenador es sacar el máximo partido posible de las cualidades de sus futbolistas. Nosotros creemos, y lo hemos visto, que jugando de una determinada manera, con mucho control sobre el balón, el equipo estaba pasándolo mal. Hemos hecho otra propuesta porque creemos que es lo mejor para este equipo en este momento, que sea fácil o difícil, yo creo que lo difícil es hacerlo fácil.

­¿Cuáles son los aspectos del juego que quieren explotar?

Queremos que todos los aspectos del equipo sean fuertes. Queremos un equipo solidario, generoso, racial y con ese espíritu competitivo que siempre ha tenido el Athletic. Creo que es algo consustancial con ser futbolista del Athletic.

­Tras sumar siete puntos las cosas se ven diferentes pero, ¿cuándo firmó el contrato no le dio miedo hacerse cargo de un club que navegaba a la deriva tanto en el ámbito institucional ­dimisión de un presidente­ como en el deportivo ­tercer entrenador en cinco meses­?

Yo entiendo que cuando a uno le invitan a hacer un trabajo dentro de lo que es la profesión de cada uno, mide bien sus posibilidades y luego responde sí o no dependiendo de las garantías que se te den para trabajar con plena autonomía y todas las de la ley. Teniendo todo esto en cuenta se dijo que sí, porque creemos que se puede llevar a cabo esa tarea de salvar al Athletic de una situación complicada. Pese a que el club está metido en turbulencias en esta última época, veía que podía realizar este trabajo.

­¿Le dice algo que tengan que ser entrenadores no formados en Lezama los que tengan que salir al rescate del club?

El fútbol es universal y el aprendizaje y los caminos son infinitos. Tener la posibilidad de coincidir en el club que tú has querido y en el que has vivido los primeros pasos de gran fútbol es un honor. Ha sido así y ya está. Tampoco hemos sido jugadores internacionales que tienen un camino ganado, y no hay que valorar esa forma de llegar al fútbol de élite. Nosotros tenemos nuestro recorrido, estamos contentos con ello y trataremos de seguir haciendo camino.

­El día de su presentación desveló que tuvo la oportunidad de firmar un contrato por dos temporadas, pero que prefirió no hacerlo al haber elecciones a la presidencia al final de la presente campaña...

Parece que he despreciado una oportunidad contractual más importante, pero hay otra cosa por medio. Era por una valoración de interpretación de gestión. La Junta Directiva está sometida a un problema de elecciones y en un principio se pensaba que el plano deportivo podía seguir en las mismas manos en caso de que todo fuera bien. Es una manera de que las turbulencias que pueden acarrear unas elecciones no afecten al equipo. Es una forma de pensar. Sin embargo, otra forma de pensar es que para mí hay que dejar manos libres al que gane y si está conforme con el trabajo que has hecho podemos hablar.

­¿El mes de enero marcará el futuro del Athletic en la Liga?

Es un periodo de gran apuesta para nosotros. Si sales con buena nota de este periodo, con equipos que están jugando en las mismas condiciones clasificatorias, podríamos salir reforzados. Por lo tanto no vamos a despistarnos ni un momento. Estos partidos tienen el doble de valor.

­Se ha conseguido remontar un poco el vuelo, pero todavía falta mucho trabajo por hacer...

Esto es una carrera de larga duración, de diez meses, y no se puede relajar nadie. Estamos en unas condiciones clasificatorias muy malas. Hemos salido de la UVI, pero estamos todavía en cuidados intensivos.

­¿Dónde debería pelear el equipo a su juicio en esta Liga?

Me gustaría no tener que sufrir como el año pasado. Nosotros vamos a darlo todo, pero será el campeonato el que ponga a cada uno en su lugar y esperemos que también contemos con cierta dosis de suerte y no haya lesiones. Al final vamos a estar diez o doce equipos hasta las últimas seis jornadas peleando por evitar el descenso. La últimas tres jornadas son 18 puntos y ningún equipo de mitad de tabla para abajo le va a llevar esa diferencia a otro.

­En comparación con otros equipos, apenas ha concedido descanso a sus jugadores durante las navidades...

Cada uno toma las decisiones que quiere y son comprensibles, pero nosotros pensamos que son unas fiestas en las que la celebración está siempre con la mesa por medio y no es lo mejor para estar centrado en el trabajo.

­Incluso se barajó la posibilidad de hacer una concentración en Mallorca, que al final se ha descartado...

Tenemos los campos un poco mal y aprovechando las fechas, pensamos que podría haber posibilidad de trabajar en otro sitio durante las navidades. Pero el propio calendario de la selección de Euskadi hizo que nueve jugadores tuvieran la semana anterior ocupada y hemos visto que no va a ser necesario hacerlo ahora, aunque quizá sí más adelante, cuando hagamos unas analíticas.

­Se está hablando mucho sobre la filosofía del Athletic, ¿cree que es viable actualmente?

Yo no soy quién para entrar a valorar esos temas, aunque tengo mi propia opinión. Introducir la opinión del entrenador no es lo más conveniente.

­Volteando la pregunta, ¿con la cantera de jugadores vascos se puede competir a primer nivel?

Si cuentas con los mejores por supuesto, pero hay que tener en cuenta que hay mucha competencia con Real, Osasuna y Alavés. Aún así, creo que hay materia prima suficiente para hacer un equipo importante. -



«Cualquier equipo debe estar abierto a una mejora»
Aunque rechaza hablar de nombres, Mané no descarta reforzar el equipo aprovechando la apertura del mercado de invierno.

­¿Está contento con la plantilla que tiene o cree que necesitaría algún jugador más para tapar los huecos que han dejado las lesiones?

Cualquier equipo debe estar abierto a cualquier tipo de mejora, eso es incuestionable. Dada la trayectoria de los dos últimos años, parece que cualquier incorporación que sea de cierto nivel sería bienvenida. Pero si no se puede, tenemos que ser consecuentes con la filosofía del Athletic y jugar con lo nuestro. No somos un equipo que en el caso de que vengan mal dadas podamos recurrir al mercado y hacer que se disparen los gastos. Hay que ser cauteloso.

­¿Es Iván Campo el objetivo para reforzar el equipo en el mercado de invierno o guardan algún otro as debajo de la manga?

Lo siento mucho, pero cualquier opción que manejemos no va a estar en la luz pública. Ya me gustaría, pero no puedo ni debo.

­La sorpresa de las navidades ha sido la llegada de Unai Alba...

Esto viene a corroborar la contestación de la anterior pregunta. Hasta que esté cerrado el acuerdo con un jugador, creo que no debo hablar sobre él. En cuanto a Alba, creo que un equipo tiene que contar con un tercer portero de categoría y si hay algún futbolista de futuro en las categorías inferiores debe estar jugando y formándose.

­A su vez, puede entenderse como un mensaje a la Segunda B en el sentido de que si se hacen bien las cosas pueden dar el salto...

Todo el que juega al fútbol y tiene el sentimiento vasco, por haberse formado en nuestra comunidad, tiene sus posibilidades de que la gente que estamos responsabilizados de dotar a futbolistas al Athletic estemos fijándonos. Puede haber diferentes criterios para su selección, pero tienen que estar en guardia.

La formación de los futbolistas viene por caminos infinitos. A veces están formados con 20 años y otros hasta los 26 ó 27 no han dado lo mejor de sí mismo. Hay que tener constancia y rigor, y sobre todo, no despreciar nada en absoluto. -

M.A.


 
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