TURIN
Igor Astarloa (Barloworld), campeón del mundo en 2003, se impuso en la prueba ciclista más antigua del calendario italiano, la Milán-Turín, disputada
sobre 199 kilómetros, y puso así punto y final a una etapa difícil en su carrera. Astarloa, de 29 años, se impuso al esprint a sus compañeros de escapada y precedió en la línea de meta a los italianos Franco Pellizotti (Liquigas) y Mirko Celestino (Milram) y Alessandro Ballan (Lampre), mientras que el siguiente grupo, compuesto por veinte integrantes, llegó liderado por el alemán Erik Zabel (Milram) a siete segundos.
El corredor vasco se mostró pletórico en los kilómetros finales y puso la rúbrica con una llegada poderosa, imposible para sus compañeros de fuga.
Astarloa no conseguía una victoria desde agosto del pasado año, cuando se impuso en la segunda etapa de la Vuelta a Burgos. El de Ermua ha sufrido notablemente después de la doble fractura de brazo y muñeca derechos que se produjo tras sufrir una caída en la Clásica Haribo disputada el 20 de febrero de 2005. Este triunfo se produce después de retrasar su reaparición al no encontrarse totalmente restablecido de una lesión en un dedo que no le permitía agarrar el manillar de su bicicleta, con lo que parece que se abren nuevas perspectivas para Astarloa.
ante el inicio del circuito del
UCI ProTour.
Astarloa releva en el palmarés de la prueba al italiano Fabio Sacchi