BARCELONA 1
CHELSEA
1
BARCELONA
Una genial jugada de Ronaldinho, a once minutos de la conclusión, fue el puente que condujo al Barcelona hasta los cuartos de final de la Liga de Campeones. El jugador brasileño fue lo mejor de un partido táctico en el que el equipo catalán consumó su venganza ante el Chelsea (1-1), el mismo rival que les apeó de Europa la temporada pasada y que marcó su gol en el tiempo añadido.
Los azulgrana jugaron el partido que más les convenía y se sobrepusieron a la lesión de Leo Messi, en el minuto 23. Tuvieron controlada la situación en todo momento, dieron una demostración de colocación defensiva y acabaron con el todopoderoso equipo de Jose Mourinho, después de una buena lección táctica del entrenador Frank Rijkaard.
A pesar de la declaración de intenciones, la de Mourinho con su alineación: cambió el sistema y buscó sorprender con una alineación más ofensiva de lo que se esperaba, todo quedó en fuego de artificios.
Al Barcelona le pilló esta variación un poco a contrapié y tuvo problemas en los ajustes al principio, especialmente en las bandas, pero poco a poco se hizo con las riendas de la situación y sigue en competición.