Lakua y Salhaketa creen que «se vende humo» con Langraiz
El anuncio de la directora de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, de construir una nueva prisión en Langraiz no ha gustado ni al consejero de Justicia del Gobierno de Lakua, Joseba Azkarraga, ni a Salhaketa. Consideran que «se está vendiendo mucho humo» al tiempo que reclaman, una vez más, la modificación del modelo de prisiones.
GASTEIZ
El consejero de Justicia, Empleo y Seguridad Social del Gobierno de Lakua, Joseba Azkarraga, señaló ayer, en relación con el anuncio de la Dirección General de Instituciones Penitenciarias sobre el cierre de la prisión de Langraiz y la construcción de una nueva cárcel, que, «con todo esto, se está vendiendo mucho humo». Tras manifestar que Gallizo «cada cierto tiempo vende alguna cosa», recordó el anuncio de crear centros de inserción «que todavía no sabemos dónde se van a ubicar», criticó. Aseguró, asimismo, que la solución al problema de los centros penitenciarios «no es tanto la construcción de uno nuevo», sino el cambio del modelo de prisiones con el fin de evitar la masificación de presos en macrocárceles. Azkarraga explicó que trasladará estas impresiones personalmente a Gallizo en una reunión que ambos mantendrán «en muy poco tiempo».
Situación «extrema»
A Salhaketa tampoco le han gustado las declaraciones de la directora de Instituciones Penitenciarias. El coordinador de dicha asociación en Araba, César Manzanos, calificó de «vergonzoso» que se esté «utilizando vilmente» la situación «extrema» que padecen las personas encarceladas en la prisión de Langraiz para «vender», a su entender, el proyecto de construcción de macrocárceles. «Lo que quieren es aplicarlo a costa de todo», indicó. Manzanos destacó que los derechos de dichas personas «nada tienen que ver con intereses ajenos, incluso especulativos». A su juicio, el Gobierno de Madrid está, primero, «legislando a golpe de alarma social», para luego plantear «este tipo de propuestas políticas». Lamentó, además, que el cierre no vaya a ser inmediato. Recordó, así, que la intención de Gallizo pasa por construir, en primer lugar, las nuevas instalaciones y después cerrar la prisión. «Es absolutamente patético», dijo el representante de Salhaketa. Defendió la aplicación de «medidas alternativas» y reiteró que lo que Instituciones Penitenciarias debe hacer es reformar el sistema penal.
«Se quiere cerrar el problema en falso»
GARA
GASTEIZ Batasuna se refirió en líneas similares sobre la situación de Langraiz. Denunció que la directora de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, intenta «cerrar en falso» el problema existente. Aseguró que la solución no pasa por «cambiar una cárcel vieja, desfasada e insalubre por otra situada al otro lado de la carretera, más grande, moderna, funcional y sin necesidad de convivir con las ratas». A su entender, el problema radica en el propio modelo penitenciario, «un modelo diseñado y ejecutado a la perfección para la destrucción de la persona presa». Agregó, en este sentido, que a pesar de que el Estado español no tiene potestad para condenar a nadie a muerte, la prisión alavesa se ha convertido, «de la mano de Instituciones Penitenciarias, en una fábrica de muerte». Acusó a «una mafia penitenciaria sin escrúpulos» de no tratar a la población presa como personas, «sino como simples piezas de un engranaje mortífero». Así las cosas, Batasuna consideró «absolutamente necesario» el cierre inmediato de la «inhumana» cárcel de Langraiz.
|