MINSK
Alexandre Milinkevich asegura que la oposición bielorrusa «no tolerará» cinco años de mandato de Alexandre Lukashenko, vencedor en los comicios presidenciales del 19 de marzo.En una entrevista a Associated Press, el principal líder opositor califica las protestas de la última semana de «grietas en la fortaleza» del Gobierno, aunque reconoció su debilidad para forzar el derrocamiento del presidente bielorruso.
«Hemos hecho agujeros y grietas en la fortaleza, pero si mantenemos golpeándolos con nuestras cabezas, especialmente con nuevas fuerzas, podríamos perder. Por eso es por lo que estamos retrocediendo y comenzando un asedio a su fortaleza: el asedio será un ataque informativo», señaló.
«Tendrá lugar una segunda tormenta, pero no vamos a esperar cinco años hasta ella», indicó Milinkevich, quien reiteró su petición a la Unión Europea para que incremente la presión contra el Gobierno de Minsk.
Interferencia e histeria
El Ministerio de Exteriores de Minsk acusó ayer a la UE y a EEUU de estar «al borde la histeria antibielorrusa». «La situación en Bielorrusia es de absoluta calma. O bien ellos permiten que alguien les lleve a engaño o ellos mismos son los que llevan a engaño a las sociedades europea y norteamericana», reitera el comunicado.
Respecto a la manifestación del pasado sábado y que tenía como objetivo una comisaría, recuerda que el propio Milinkevich tachó de «provocación» esta marcha, convocada por el también opositor Alexandre Koizulin.
La UE reiteró ayer su preocupación por la «represión» de esta marcha, que acabó con la detención de Koizulin y otros activistas.
Minsk volvió a exigir a la UE y a EEUU que dejen de interferir en el país.
