Elecciones en Israel
Ehud Olmert se pone manos a la obra matizando su unilateralismo
El partido Kadima de Ariel Sharon ya ha entrado en la historia de Israel tras convertirse en el primer partido que gana las primeras elecciones a las que se presenta, pero el resultado final es peor de lo que auguraban las encuestas, lo que obligará a Ehud Olmert a matizar su plan para crear las fronteras «definitivas».
JERUSALEN
Una vez escrutado el 99,67% de los votos depositados en las elecciones del martes, Kadima cuenta con 28 escaños, el Partido Laborista con 20 y el ultraortodoxo sefardí Shas con 13. Por detrás se sitúa la gran sorpresa de estos comicios, el partido Israel Beitenu (Israel Nuestro Hogar) del racista Avigdor Lieberman, con 12 escaños, mientras que el hasta ahora partido gobernante, el Likud, sólo ha logrado 11, convirtiéndose en el gran derrotado.Los medios israelíes dan por sentado que ya en la noche del martes comenzaron, de manera oficial, las negociaciones entre Kadima y los laboristas. Se espera que Olmert recurra también al Partido del Judaísmo Unido y la Torah (ultraortodoxo, 6 escaños) y al Partido de los Pensionistas (7 escaños). Todas las opciones estarían abiertas respecto a Shas, Israel Beitenu y el izquierdista Meretz (4 escaños). Olmert ha dicho que quiere un gobierno de coalición amplia, no dependiente de un solo socio parlamentario, respondiendo así al hecho de que Kadima ha obtenido menos escaños de lo previsto, y Shas y Israel Beitenu, más. El actual primer ministro insistió ayer en que Kadima no cederá ninguno de los tres Ministerios considerados clave Exteriores, Defensa y Finanzas, pero con la composición parlamentaria que se avecina, es posible que el candidato laborista, Amir Peretz, reclame para él la cartera de Finanzas. El sindicalista, apunta el diario “Haaretz”, también podría aceptar la cartera de Defensa, si Kadima se compromete a seguir un programa de reformas socioeconómicas, incluyendo un aumento del salario mínimo y de las pensiones, y si se le da derecho de veto sobre los próximos presupuestos. El ministro de Kadima Meir Sheetrit sugirió que su partido podría tener que ceder una de las tres carteras principales, pero también advirtió de que su formación puede gobernar sin los laboristas, recurriendo al Likud y a Israel Beitenu. Eso sí, estos dos partidos se oponen a la retirada parcial de Cisjordania que Olmert quiere llevar a cabo durante su próximo mandato, con el objetivo declarado de fijar las fronteras del Estado de Israel en 2010. El partido Kadima, vencedor de las elecciones, necesitará al menos un año para terminar de elaborar los planes de retirada de algunas partes de Cisjordania, de ampliar los bloques de colonias judías y de trazar las fronteras israelíes con un futuro Estado palestino, según indicó uno de los arquitectos de este plan, el diputado Otniel Schneller, a Associated Press. Schneller indicó que ha pasado los últimos días confeccionando el plan que posibilitará a Olmert cumplir su promesa de finalizar las fronteras con un futuro Estado palestino para 2010. Según relató el diputado, durante su primer año en el poder, Kadima esperará para ver si el nuevo Gobierno palestino encabezado por Hamas «modera» sus puntos de vista. Durante ese periodo, Olmert hablará con los colonos judíos sobre los lugares alternativos para vivir, señaló Schneller, él mismo colono. En lo dos o tres años siguientes, Israel construirá comunidades alternativas para los colonos, bien en los bloques ya existentes en Cisjordania que Israel quiere mantener o en zonas de Israel, y trasladará a los colonos allí, prosiguió. En el trazado de sus fronteras, ya sea por retiradas unilaterales o negociaciones, «Israel intentará asegurarse de que los palestinos consiguen un territorio contiguo para que puedan establecer un Estado viable», añadió Schneller. A falta de un acuerdo de paz, el Ejército permanecerá en las zonas evacuadas, señalaron fuentes des Kadima. Entretanto, responsables laboristas han iniciado ya contactos con el Shas y los Pensionistas, con el objetivo de presentar ante las negociaciones con Kadima un «frente social» unido y con un peso de 40 escaños. Los laboristas están más que satisfechos del éxito obtenido, ya que han logrado más escaños de los que preveían las encuestas. Su secretario general, Eitan Cabel, destacó que su nuevo presidente, Amir Peretz, fue «el primer líder que no provoca una pérdida de escaños en las elecciones desde (la muerte en atentado del primer ministro Isaac) Rabin». Por su parte, el líder de Israel Beitenu, cuya base principal son los inmigrantes rusos, consideró que los doce escaños logrados por la formación le auguran un futuro muy prometedor.
El Gobierno de Hamas jura sus cargos
Los 24 ministros del nuevo Gobierno palestino, formado en su mayoría por miembros de Hamas, además de algunos tecnócratas e independientes, juraron sus cargos ante el presidente de la ANP, Mahmud Abbas, en una breve ceremonia celebrada en Cisjordania y Gaza y trasmitida simultáneamente por vídeoconferencia. El primer ministro, Ismail Haniyeh, con una mano sobre el Corán, prometió ser «leal a la patria y a los lugares sagrados». Tras la jura, los ministros se alinearon junto al presidente palestino para una foto ante los medios de comunicación. El nuevo Ejecutivo palestino entra en funciones un día después de las elecciones generales israelíes, para no influir en éstas. -
Un derechista que vive rodeado de militantes de izquierdas
En apenas tres meses, Olmert ha pasado de desempeñar el simbólico cargo de viceprimer ministro a la sombra de Ariel Sharon a ganar las elecciones. El infarto de Sharon, en enero, le lanzó a la Jefatura de Gobierno. Nadie apostaba por él. Le achacaban falta de carisma y de trayectoria militar un requisito casi imprescindible para llegar a ser líder israelí, pero le sobran ambición, inteligencia y locuacidad, según apunta el escritor Uri Avnery. De su carrera política, es destacable su estancia en la Alcaldía de Jerusalén. En sus diez años de mandato, promovió la judeización de Jerusalén Este territorio palestino que Israel ocupó en la guerra de 1967. Ordenó costruir multitud de edificios para que se asentaran los judíos, mientras demolía las casas de los palestinos que vivían allí anteriormente. Además, la «ciudad santa» se empobreció durante su mandato. Descuidó las infraestructuras y cerró las instituciones palestinas que hasta entonces proveían de servicios a esta comunidad. Por supuesto, él no se hizo cargo de esas funciones. Tampoco muchos judíos de Jerusalén guardan buen recuerdo de su etapa como alcalde. Gran cantidad de profesionales laicos, descontentos con su política, abandonaron masivamente la ciudad. En su propia casa, su familia no comparte sus ideas políticas. Su esposa, Aliza, y sus cuatro hijos son de izquierdas. Aliza Olmert, escultora, pintora y dramaturga, confesó que, tras 35 años de convivencia, el martes fue la primera vez que votó a su marido. Su esposa tiene una concepción totalmente diferente sobre Israel de la de su marido. Se opone a la colonización de tierras palestinas y a la «retórica nacionalista sobre una Jerusalén unida, histórica, santa y eterna». Sólo se han puesto de acuerdo «en que no podemos ponernos de acuerdo», ironiza Alize para explicar la longevidad de su matrimonio. Una de sus dos hijas, Dana, rechaza los «asesinatos selectivos» y milita en una asociación de mujeres israelíes que se apuestan en los check-points para instar a los soldados a que no maltraten a los civiles palestinos. - Kristina MARTIN
|