BRUSELAS
Los presidentes del Friendship o Grupo de Apoyo al Proceso de Paz en Euskal Herria, los eurodiputados Bernat Joan (ERC) y Helmuth Markov (PDS), comparecieron ayer en Bruselas para instar al Parlamento Europeo, a la Comisión Europea y al Consejo Europeo que «se impliquen en el proceso para que pueda culminar con éxito». Joan y Markov hicieron público un escrito en el que destacan que el proceso en Euskal Herria «debería garantizar el derecho de los vascos a decidir su futuro libremente».
Junto a ello, añaden que «el respeto a esta decisión por parte de las instituciones españolas, francesas y europeas es la clave fundamental para alcanzar una paz y una democracia duraderas y estables en Euskal Herria».
Joan se mostró «absolutamente convencido» de que se necesitará la mediación de alguna figura del ámbito internacional en Euskal Herria, tal y como ocurrió en Irlanda tras la tregua del IRA. «Si es una cuestión interna y si alguien es juez y parte, el proceso de paz está abocado al fracaso. Por tanto, estoy convencido de que es imprescindible que haya una mediación internacional para que las cosas lleguen a buen puerto», aseveró el eurodiputado ibicenco.
Abrir las puertas a otros grupos
En este sentido, Joan explicó que «este puede ser un buen momento para abrir las puertas de nuestro grupo de apoyo a representantes de otros grupos políticos de la Eurocámara para posibilitar una mejor comprensión del conflicto vasco y poder colaborar entre todos hacia una solución satisfactoria para todas las partes implicadas». De hecho, ya han mantenido contactos con los presidentes de los principales grupos parlamentarios de la Eurocámara Hans Gert Pöttering, del PartidoPopular;Martin Schultz,del Partido Socialista; y Graham Watson, de la Alianza de Liberales y Demócratas para sondear su disposición a apoyar el Friendship.
Joan añadió que el Friend-ship va a defender que el Parlamento Europeo realice labores de monitorización del conflicto, para que esta institución pueda «levantar puentes de paz».
Los dos eurodiputados hicieron también un llamamiento al diálogo y a la prudencia, «ya que ha llegado la hora de escuchar y de no cerrar puertas».
El eurodiputado de Esquerra Republicana señaló que es totalmente necesario que «los vascos puedan hablar sin coacciones de ningún tipo y sean ellos mismos quienes libre y democráticamente decidan su futuro y sus mecanismos de convivencia, ya que el final de la violencia no es una simple cuestión de orden público».
El documento presentado por Markov y Joan considera como «un paso histórico» el alto el fuego permanente de ETA, por lo que insta a la Unión Europea a «reconocer su importancia y significación».
«Consideramos que es un paso adelante muy importante para crear las condicionesnecesarias para desarrollar el proceso de paz en Euskal Herria. Es un paso adelante muy importante para Europa», añade el documento del Grupo de Apoyo de la Eurocámara.
Los presidentes del Friend-ship felicitaron a «todos los agentes sociales y políticos que han hecho posible» la declaración de alto el fuego, al tiempo que subrayaron que en su calidad de «impulsores de un proceso democrático para la resolución del conflicto estamos especialmente contentos con esta decisión».
En este sentido, renovaron su compromiso de seguir trabajando para «crear un escenario pacífico y democrático permanentemente en Euskal Herria».
Además, los dos presidentes del Friendship señalaron que el proceso político no puede tolerar exclusiones de ningún tipo, y que «todos los partidos políticos tienen derecho a participar».
Junto a ello, Markov y Joan subrayaron que «los ciudadanos de todos los territorios vascos tienen derecho a participar en el proceso político», al tiempo que defendieron que «hay que dar la última palabra al conjunto de la población vasca».
