DIYARBAKIR
Cientos de manifestantes kurdos se enfrentaron con las fuerzas turcas en la considerada capital kurda de Diyarbakir por segundo día. Las protestas comenzaron el martes durante los funerales de cuatro guerrilleros del PKK que murieron el pasado sábado junto a otros diez compañeros a manos de las tropas turcas en la región kurda de Bingol. Protestas similares se produjeron también en la ciudad de Adana en el funeral de otro miliciano.Según la agencia kurda Firat, el número de heridos tras dos días de protestas se eleva a 95, además de dos jóvenes muertos a tiros en los enfrentamientos registrados en el popular barrio de Baglar, en Diyarbakir. El número de kurdos detenidos supera los 80. Ayer, también se produjeron choques en la ciudad de Siirt, aunque se desconoce el alcance de los mismos.
El Gobierno turco reforzó ayer su aparato represivo en Kurdistán Norte con el envío de contingentes de policías. El Ejército turco, por su parte, ha desplegado tropas y blindados en la ciudad ante el alcance de las protestas y el temor a que se extiendan a otras ciudades.
Cierre de comercios y huelga
La agencia de noticias turca Anatolia indicó que los enfrentamientos continuaban en la tarde de ayer en Diyarbakir. Los comercios de la ciudad permanecieron ayer cerrados, siguiendo el llamamiento efectuado desde la televisión Roj TV, que emite desde Dinamarca. Los estudiantes de la Universidad de Dicle tampoco acudieron ayer a las clases en señal de protesta.
Un comunicado de la organización Iniciativa Popular de Diyarbakir llamó ayer los kurdos a extender las protestas a otras ciudades de Kurdistán Norte.La tensión, de por sí elevada en el castigado Kurdistán Norte, se disparó el martes durante los funerales de cuatro de los milicianos abatidos por los turcos. La manifestación de duelo se convirtió después en una demostración de apoyo al PKK y al encarcelado líder Ocalan.
El Gobierno turco ha ignorado todos los gestos de distensión efectuados por los kurdos, incluida la tregua unilateral que declaró el PKK. La vuelta a las armas de la la organización kurda, en junio de 2004, una vez finalizada la tregua, vuelve a mostrar con crudeza el conflicto turco-kurdo.