El Foro de Firmantes del Acuerdo Democrático de Base ­conformado por 55 entidades entre partidos, sindicatos y organizaciones sociales de Euskal Herria­ ha presentado en la antesala del Aberri Eguna 2006 el balance de su actuación. No se trata de una fecha casual, ya que la jornada de hoy era la meta temporal en la que había situado su compromiso para que se constituyera la Mesa para la Resolución. Un compromiso que, como ayer reconocieron públicamente sus impulsores, no se ha cumplido todavía, a pesar de lo cual evitan caer en el pesimismo, igual que huyen de la euforia ante la situación que de cara a la resolución del contencioso político vasco ha abierto la organización ETA con su declaración de alto el fuego permanente.

Existen, a juicio de este Foro de amplia representación en Euskal Herria, «las condiciones y la oportunidad» para que ese objetivo no cumplido, la creación de la Mesa para la Resolución, se ponga en marcha. Además de la declaración de alto el fuego, que elimina de la escena política la excusa que la actividad armada de ETA ha supuesto para quienes se negaban a la configuración de un proceso democrático de resolución del conflicto político, el Foro de Firmantes señala en el «haber» de la Mesa para la Resolución las relaciones de «complicidad» que se están abriendo entre los partidos, el apoyo internacional recabado, la adhesión social expresada en la impresionante manifestación del 1 de Abril y la importante aportación de las mujeres de prácticamente todo el arco político vasco. Elementos todos ellos de indudable importancia política, pero que no suponen garantía plena para un proceso que prácticamente antes de nacer debe afrontar ya agresiones que dificultan su desarrollo.

En las últimas fechas cada vez se hacen más habituales fotos como la que los firmantes del Acuerdo se hicieron ayer en Iruñea, pero la dispersión de actividades previstas para la jornada de hoy demuestra que, a pesar de existir las condiciones y la oportunidad para que Euskal Herria pueda iniciar un recorrido colectivo que le conduzca a la paz y a la normalización política, aún es mucho el trabajo que queda por hacer. No ha podido ser, y el Aberri Eguna de 2006 no ha sido el de la Mesa para la Resolución del conflicto, pero de alguna manera sería de esperar que el Acuerdo Democrático de Base que ayer reunió a una parte importante de la representación política, sindical y social de Euskal Herria inspire los discursos y movilizaciones de esta jornada. -