AMSTERDAM
El conjunto holandés Rabobank parte como el equipo a batir en la prestigiosa clásica Amstel Gold Race que se disputa esta tarde. Los componentes del Rabobank serán, una vez más, la referencia de la prueba ya que actúan en su terreno y como años anteriores es uno de sus objetivos al estar en casa y ser el único equipo holandés incluido en la elite del ciclismo, en la denominada categoría ProTour.
La prueba de los tulipanes es uno de los mayores acontecimientos deportivos de Holanda y por ello que el equipo de casa sea el enemigo a batir con ilustres como los españoles Oscar Freire y Juan Antonio Flecha y la eterna promesa del ciclismo holandés Michael Boogerd, vencedor en la edición de 1999 y subcampeón en cuatro.
El trazado es prácticamente el mismo de las 40 ediciones disputadas hasta el momento. Los retoques son mínimos en los 253 kilómetros de recorrido siendo el denominado punto clave la subida al muro de Cauberg en la parte final de la misma. Un puerto de mil metros, con tramos que llegan hasta el 15% de desnivel.
La principal novedad en esta ocasión es que se recupera el alto de Gulpener, que se sube por su parte más dura y que se encuentra a pocos kilómetros antes de encarar los kilómetros finales del circuito de Maastricht, tras haber superado treinta repechos que suelen pasar factura a muchos de los corredores que en la salida parten como favoritos.
Un recorrido duro y selectivo con una participación de lujo, pues salvo imprevistos de última hora, además de los mencionados Freire y Boogerd en la lista de preinscritos se encuentran los italianos Paolo Bettini, Pozzatto, Davide Rebellin y Stefano Garzelli; además de los «clasicómanos» Van Petegem, Erik Dekker, Van Bon, Jens Voigt y Alejandro Valverde entre otros.