Otegi anuncia para la semana próxima «nuevos compromisos» en pro del diálogo
El portavoz abertzale Arnaldo Otegi reiteró ayer que «ya ha llegado el momento de construir la mesa de diálogo multilateral», apuntando a la misma como «la mejor garantía que necesitará el proceso». Anunció así que la semana próxima adoptarán «nuevos compromisos» en esa línea, con el fin de buscar desde el compromiso propio el del resto de los agentes. También reclamó a los estados español y francés «que cesen todas las agresiones contra este pueblo».
LEIOA
Arnaldo Otegi anunció ayer que la izquierda abertzale adoptará la semana que viene «nuevos compromisos» para favorecer la creación de una mesa de diálogo multilateral, ya que, según indicó, la situación actual del proceso es «muy delicada» y «si no hay mesa de resolución, sencillamente, no hay proceso».«Adoptaremos nuevos compromisos, con nitidez y transparencia. Ha llegado el momento de construir esa mesa porque ésa es la mejor garantía de hacer eficaz este proceso. Buscaremos desde el compromiso propio el compromiso del resto de agentes políticos, sociales y sindicales para buscar un acuerdo político que dé satisfacción a las aspiraciones nacionales y democráticas de este país», precisó durante su intervención en la conferencia que el campus de la UPV de Leioa acogió a iniciativa del colectivo universitario Elkarbide. El portavoz independentista insistió una vez más en que «no hay ninguna duda de que nos encontramos frente a una oportunidad histórica», a la vez que lamentó que también hay quien desde el inicio de este proceso «ha intentado no sólo sabotearlo, sino hablar de esta oportunidad histórica en términos de manipulación ideológica y de intoxicación».
«Quiebra de la apuesta del 78» De todos modos, Batasuna cree que sí es posible construir un proceso resolutivo, si bien Otegi puntualizó a este respecto que «la razón de que exista una oportunidad histórica es que se ha producido una quiebra evidente del modelo que se quiso imponer en el 78».
El líder independentista resaltó, por el contrario, «la fortaleza de la izquierda abertzale» que, según indicó, se basa fundamentalmente en dos factores. Manifestó así que a día de hoy «todo el mundo sabe que el futuro de este país se va a construir desde otros parámetros políticos. No se va a construir desde la partición, ni desde el Estatuto de Gernika, ni desde el Amejoramiento foral», aseveró.Y, acto seguido, también dijo que la posición que Batasuna defenderá en el diálogo multilateral no es una posición de partido, ni de intereses partidistas. «Defenderemos la necesidad de construir un marco democrático que dé solución al problema territorial y de autodeterminación. La gran ventaja que tenemos es que sabemos que nuestra posición es compartida por la mayoría de la sociedad de este país», puntualizó, al tiempo que resaltó lo siguiente: «si alguien se quiere enfrentar a estas posiciones, o bien negando o bien intentando sabotearlo, no le estará diciendo que no a Batasuna, ni a la izquierda abertzale, sino a la mayoría social, sindical y política. Y tendrá que asumir las consecuencias». Por otro lado, Otegi quiso ahondar un poco más en las declaraciones que realizaron la víspera alertando de la «extrema gravedad» de la situación actual. Explicó que más allá de las citaciones de los mahaikides a la Audiencia Nacional, que también creen «muy graves», lo que les preocupa verdaderamente es «la agresión permanente a Batasuna por parte de instancias judiciales del Estado español, que debería haber desaparecido hace tiempo». A este respecto censuró también las extradiciones de los seis vascos presos en México o los golpes y arrestos la víspera de varios jóvenes, entre otras cuestiones «incompatibles con el proceso». Así, incidió en que las manifestaciones del viernes las realizaron «con total responsabilidad política», y criticó que «por parte del Estado español hay un interés en mantener una estrategia de golpeo y de presión contra un sector que lo único que defiende es la construcción de una mesa de diálogo». «Si no hay condiciones de igualdad para el diálogo multilateral no hay diálogo. Sin diálogo no hay mesa de resolución, y sin ella no hay proceso», concluyó.
El Gobierno español habla de «normalidad»
MADRID La vicepresidenta primera del Gobierno español, María Teresa Fernández de la Vega, indicó ayer que en el proceso «de camino hacia la paz», que se encuentra aún «en fase de verificación», las cosas van «razonablemente bien», y reiteró que en el mismo «no habrá atajos ni precio político», a la vez que garantizó que durante este tiempo las instituciones seguirán funcionando «con normalidad». Respondía así a las declaraciones que Arnaldo Otegi realizó la víspera, en las que el mahaikide calificó el momento actual de «extrema gravedad» y sobre las que elu-dió hacer ninguna valoración. Desde el PSE, el portavoz José Antonio Pastor, sí hizo referencia a las manifestaciones del diri- gente independentista exigiendo al Gobierno español el cese de «las agresiones». A juicio de Pastor, esas palabras demuestran «por desgracia, una vez más», que la izquierda abertzale «tiende a ser más exigente con la democracia y el Estado de Derecho que consigo mismos». «Largo y difícil» «Probablemente, gran parte de los problemas que tiene el señor Otegi desaparecerían si ETA, además del alto el fuego, hubiera hecho un anuncio de disolución definitiva», indicó. No obstante, consideró que las declaraciones de Otegi deben incluirse «dentro del contexto de un proceso que va a ser largo y difícil». Leopoldo Barreda (PP) señaló que Otegi pretende «el desistimiento del Estado de Derecho» con objeto de «sustraerse a la acción de la Justicia». Por el contrario, el presidente de EA en Nafarroa, Maiorga Ramírez, pidió el fin de «todo tipo de agresiones» y de la «ofensiva judicial», al creer que suponen un «retroceso» en el proceso de resolución. Mientras, Mikel Arana (EB) tildó la última citación de mahaikides como «obstáculos» al proceso y «absurdo jurídico».
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