JERUSALEN
Hasta el momento, Hamas ha rechazado la fecha límite de hoy y ha reclamado cambios en la llamada «iniciativa de los presos» (Documento de Reconciliación Nacional, diseñado por palestinos encarcelados en Israel), que llama a la creación de un Estado en Cisjordania y la franja de Gaza de acuerdo con las fronteras previas a 1967 y que supone un reconocimiento de facto de Israel.
Según este texto, en cuya redacción participaron el secretario general de Al Fatah, Marwan Barghouti, y un destacado responsable de Hamas, Abdel Halek Natshe, la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) es el único representante legítimo del pueblo palestino y Hamas y la Jihad Islámica deberían unirse a sus instituciones.
Entretanto, los palestinos vivieron ayer otra jornada de violencia, con choques entre milicianos de Hamas y de Al Fatah y con «ataques selectivos» del Ejército israelí. Dos milicianos palestinos fallecieron por la tarde y otros dos resultaron heridos por el impacto de tres misiles lanzados por aviones contra su coche en el campamento de refugiados de Jabalia. El objetivo del ataque era Eiman Assiylia, de 26 años y miembro de los Comités de Resistencia Popular. En el atentado también perdió la vida Majdi Hamed.
Por la mañana, en el mismo campamento, un miembro de Hamas murió por la explosión de una bomba en su casa. Otras dos personas quedaron heridas, entre ellas su hijo de ocho años.
Por otra parte, al menos cinco palestinos murieron en choques registrados en la noche del domingo entre hombres armados de las dos milicias en la franja de Gaza. Según fuentes médicas citadas por el diario israelí “Haaretz”, hombres armados miembros del Servicio de Seguridad preventiva, que controla Al Fatah, abatieron a una mujer embarazada e hirieron a su marido y a su hermano, ambos milicianos de Hamas, en el sur de la franja de Gaza. Uno de los milicianos falleció posteriormente, al igual que otros tres viandantes que fueron alcanzados por el fuego cruzado.
Según testigos, los hombres armados abrieron fuego contra el líder de Hamas Mohamed al Ghalban, cuando viajaba en su coche junto con miembros de su familia en la localidad de Jan Yunes. Los milicianos de Hamas acusaron a Al Fatah del ataque, por lo que se desplegaron inmediatamente en las calles.
Además, 30 personas asaltaron una sede del Banco Arabe en Gaza para reclamar los salarios prometidos por el Gobierno. Este había prometido que 40.000 funcionarios iban a recibir ayer sus salarios, los primeros en tres meses, pero las cantidades de dinero disponibles no permitirán cumplir el compromiso.