FRANKFURT
La policía de Frankfurt tuvo que comunicar ayer oficialmente que las entradas para el Mundial se han agotado por completo tras los rumores surgidos entre hinchas ingleses apuntando la existencia de algunas entradas sueltas. Los aficionados, que se habían concentrado en los alrededores del estadio de la metrópoli financiera alemana, una de las doce sedes del campeonato, abandonaron paulatinamente el lugar tras comprobar que la noticia sobre entradas aún disponibles era falsa.
La policía se dirigió directamente a los hinchas para informarles de la situación de las entradas. La demanda para los partidos del Mundial 2006 supera con creces la oferta y muchos aficionados se han quedado sin poder entrar a los estadios, pese a los esfuerzos por conseguir un boleto para ver alguno de los compromisos.
En la tercera fase de venta de entradas, que terminó a mediados de enero, hubo un total de 677.900 pedidos, frente a 250.000 entradas puestas a la venta finalmente.
Los partidos que más interés han suscitado son el inaugural en Múnich, la final en Berlín y algunos encuentros de la primera fase como Argentina-Holanda o Alemania-Polonia.
Cifras astronómicas
El mercado negro de reventa floreció especialmente en Frankfurt, donde se llegaron a pedir hasta 1.000 libras (1.456 euros) por una entrada para el partido Inglaterra-Paraguay.