EHNE y UAGA critican que la reforma del mercado del vino olvida a los viticultores
Liberalización del sector vitivinícola, pérdida del control de la producción, olvido de los productores y de sus rentas, y ausencia de políticas comercializadoras que potencien las producciones de calidad son las principales críticas que realizan los productores vascos de la Denominación de Origen Calificada Rioja, agrupados en UAGA y EHNE, a la reforma del mercado común del vino propuesta por Bruselas. Esta reforma prevé el arranque de 400.000 hectáreas de viñedos en cinco años en la UE con el fin de eliminar excedentes, y modifica los sistemas de ayudas.
GASTEIZ
UAGA ha mostrado su rechazo a la propuesta de la Comisión Europea para reformar la Organización Común del Mercado del vino, que supondría el arranque en cinco años de 400.000 hectáreas de viñedo, el 12% de la superficie total en la UE, y la eliminación de los derechos de plantación en 2013, entre otras medidas con las que pretende eliminar excedentes. Para el sindicato agrario alavés, estos planes «ponen fecha a la total liberalización del sector y olvidan la renta de la persona viticultora como principal objetivo de la reforma». En opinión de UAGA, la reforma «debe definir un nuevo modelo que corrija los problemas detectados anteriormente estableciendo una verdadera política vitivinícola que tenga como prioridad a las y los viticultores profesionales». El sindicato rechaza que se eliminen todas las medidas de control del potencial de producción y de gestión del mercado. Tampoco acepta que los estados miembros se encarguen del reparto del presupuesto ni su posible transferencia a las políticas de desarrollo rural, que puedan ocasionar la cofinanciación de las ayudas.
Pago por superficie El nuevo sistema previsto en la UE instauraría un pago por superficie directamente a la persona agricultora. Bruselas pretende reemplazar los actuales apoyos por una asignación para cada país de la UE, que los gobiernos repartirán con más libertad. UAGA rechaza también «de forma rotunda el desacoplamiento de las ayudas al sector», es decir, que las ayudas dejen de estar vinculadas a la producción.
En su lugar, se incorporaría al régimen de pago único «puesto que llevaría asociada una liberalización de plantaciones y la supresión de todas las medidas actuales de mercado, renunciando por tanto a realizar una política vitivinícola y dejando al sector sin ninguna herramienta de gestión». Asimismo, UAGA cree que con el presupuesto disponible, «el pago desacoplado posible sería muy pequeño para un cultivo permanente como el viñedo y no compensaría la pérdida de las medidas de mercado y el descenso de los precios que se producirían para muchas y muchos productores».
Medidas de comercialización Por otro lado, criticó que la reforma «no presenta una política clara de medidas positivas de mercado con la que mejorar la comercialización de los vinos comunitarios, única garantía de continuidad de los viticultores a largo plazo».
EHNE-Nafarroa compartió estas tesis para expresar su rechazo a la reforma, que «supone prácticamente la liberalización total en prácticas enológicas». El sindicato añadió que «es vital para el sector vitivinícola europeo que se mantenga la prohibición de vinificación de mostos importados de terceros países». Consideró que es «positiva» la puesta en marcha de una política subsidiaria aplicada mediante cheques estatales, aunque estimó que la propuesta de la Comisión «no concreta las medidas que serían financiadas por los cheques nacionales ni los criterios por los que se efectuará el reparto entre países».
Un plan «poco acertado»
GASTEIZ El Departamento de Agricultura del Gobierno de Lakua consideró «poco acertada» la propuesta de reforma de la OCM vitivinícola planteada por la UE. Recordó que las producciones vascas amparadas bajo cuatro denominaciones de origen han apostado por la calidad con «muy buenos resultados». En su opinión, no se puede pretender mantener a los vinos europeos en una posición de liderazgo «desde propuestas de desmantelamiento basadas en planteamientos acomplejados. Plantear arrancar viñedos mientras los países emergentes hincan viñas de forma indiscriminada no parece una propuesta lógica», opinó. En su lugar, ve necesaria una apuesta por la calidad, la imagen y la comercialización. Bruselas quiere hacer frente a los
excedentes
La UE es el primer exportador mundial de vino, pero pierde terreno ante Australia, Argentina, Sudáfrica y Chile, a la vez que desciende el consumo. Bruselas quiere hacer frente a este hecho y al aumento de excedentes. La propuesta de reforma debe aún debatirse y no se propondrá legalmente hasta enero de 2007. -
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