SUIZA 2
COREA DEL SUR 0
BILBO
Sin hacer nada del otro mundo, el orden suizo fue suficiente para defenderse de las acometidas coreanas y aprovechar sus errores. Los asiáticos ofrecieron un nuevo recital de galopadas y velocidad, pero sin la precisión de los helvéticos en la definición.El inicio no hacía presagiar nada bueno. No es de extrañar que alguno se durmiera porque el juego era tan trabado que era imposible trenzar cuatro pases seguidos. El único que ofrecía un poco de luz era Tranquilo Barnetta. Aparte de destacar por su nombre, el media punta gozaba de movilidad y se hacía notar, apareciendo por todos los sitios.
Faltaba el impulso final, aunque Suiza estaba más confiada y consiguió dar primero. Y nunca mejor dicho. Senderos casi se deja la cara al rematar el balón con el que adelantó a su equipo. No sería el único golpe porque después tuvo que ser sustituido.
Corea despertó al verse por detrás y con su incansable constancia fue imponiéndose en el campo. El ex realista Lee Chun Soo lideraba a su selección y fue el jugador más incisivo en ataque. Pero el gol no aparecía por ningún lado porque Zuberbuelher iba sobrado. Tenían que arriesgar. Advocaat tiró de repertorio y metió a Ahn, decisivo en la remontada ante Togo de la primera jornada. Sin embargo, la reacción se quedó sin premio y los coreanos comenzaron a pagar el esfuerzo físico.
Bien aprendido el manual de sus vecinos italianos, Suiza espero hasta tener la oportunidad de sentenciar. Un error del árbitro despistó a los coreanos y Frey finiquitó el partido.